Cámara del Agro reclama al Gobierno por cierre del puente Mocá en Suchitepéquez
El sector agro guatemalteco acusa al Ministerio de Comunicaciones de negligencia por falta de mantenimiento vial y advierte sobre los impactos en la producción y el comercio.
El cierre del puente Mocá, ubicado en el kilómetro 132 de la ruta CA-2 Occidente en Suchitepéquez, desató fuertes críticas de la Cámara del Agro de Guatemala (Camagro) hacia el Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV). La entidad responsabilizó directamente a la cartera por la falta de mantenimiento en la infraestructura vial y cuestionó que, a agosto, apenas se haya ejecutado el 30% del presupuesto asignado, pese a las necesidades urgentes del país.
La gremial advirtió que el cierre de esta vía no es un hecho aislado, sino el reflejo de un problema estructural: el deterioro progresivo de la red de carreteras y la lenta respuesta estatal. "El CIV debe ejecutar con transparencia y calidad. La inacción afecta la competitividad de Guatemala, limita el comercio y encarece los costos de transporte de los productos agrícolas", sostuvo Camagro en un comunicado.
El puente Mocá es un paso estratégico para el transporte de granos básicos, caña de azúcar, café y hortalizas, cultivos que dependen de la conexión de la Costa Sur con la capital y los puertos. Su cierre parcial obliga a desvíos que incrementan el tiempo de traslado y los gastos logísticos. Para un sector como el agroexportador, que trabaja con márgenes ajustados y cronogramas definidos, cada hora de retraso representa pérdidas económicas y riesgos contractuales.
Infraestructura rezagada y efectos en la producción
La Camagro recordó que durante los últimos dos años se habían advertido daños visibles en el puente, sin que el CIV tomara medidas preventivas. La falta de mantenimiento derivó en el colapso parcial de la estructura y en la necesidad de clausurarla para evitar riesgos mayores. La situación, señalaron, "se pudo prevenir con intervenciones oportunas y una ejecución más eficiente de los recursos públicos".
La Dirección de Caminos informó que como medida temporal se habilitó un carril reversible en un puente paralelo, con el objetivo de mantener el flujo vehicular. Sin embargo, transportistas y productores consideran que esta solución es insuficiente, ya que genera embotellamientos, demora el tránsito de camiones de carga y pone en riesgo la cadena de suministro.
En regiones productivas como Suchitepéquez, Retalhuleu y Escuintla, donde la caña de azúcar y los cultivos de exportación son fundamentales, el impacto logístico del cierre ya se deja sentir. Además, pequeños agricultores que dependen de los mercados locales enfrentan mayores dificultades para colocar sus productos, dado que los intermediarios reducen sus viajes por el aumento en los costos de transporte.
La crítica de Camagro no solo se centra en el puente Mocá, sino en la necesidad de un plan nacional de infraestructura que priorice las carreteras agrícolas y logísticas. Según la entidad, "el rezago en mantenimiento limita el potencial exportador y afecta la seguridad alimentaria, ya que encarece la llegada de productos a los mercados urbanos".
Exigencia de transparencia y soluciones de largo plazo
El sector privado exige al Ejecutivo ejecutar de manera ágil, transparente y con calidad técnica los fondos asignados al CIV, y advierte que los bajos niveles de ejecución reflejan falta de gestión y planificación. De mantenerse esta tendencia, los problemas de conectividad seguirán golpeando a la producción y al comercio, afectando no solo al agro sino a toda la economía nacional.
Los productores consideran que la situación del puente Mocá debe marcar un precedente para evitar que otras rutas principales lleguen a un punto crítico. A su vez, piden que las soluciones no se limiten a parches temporales, sino que contemplen reparaciones estructurales y proyectos de infraestructura duraderos, capaces de responder a las necesidades de crecimiento del país.
La Cámara del Agro insistió en que Guatemala necesita garantizar vías de comunicación confiables para mantener su competitividad regional. "La falta de infraestructura de calidad afecta la capacidad de exportar y limita la llegada de insumos al campo. Sin caminos seguros y eficientes, el desarrollo del agro está en riesgo", remarcó la entidad.
En medio de la temporada agrícola y de exportaciones hacia los principales socios comerciales, la demanda es clara: asegurar la conectividad vial para que el sector productivo pueda sostener su ritmo de trabajo y cumplir con los mercados internacionales. El caso del puente Mocá se convierte, así, en un llamado urgente a priorizar la infraestructura como parte esencial del desarrollo económico del país.