¿Veterinario en cada campo? La clave uruguaya para frenar brucelosis y garrapata
En las LII Jornadas Uruguayas de Buiatría se propuso implementar la figura del veterinario corresponsable de predios como respuesta efectiva a la amenaza sanitaria que representan la brucelosis y la garrapata en el sector ganadero.
Durante las LII Jornadas Uruguayas de Buiatría realizadas en Paysandú, la presidenta del Centro Médico Veterinario local, Carmela Dos Santos, presentó una propuesta concreta para avanzar en la batalla contra dos viejas amenazas del campo: la brucelosis y la garrapata.
La idea: instaurar la figura del veterinario corresponsable de predios. Esta figura técnica permitiría mejorar el seguimiento sanitario, garantizar un uso más racional de medicamentos y aportar al sistema nacional de trazabilidad.
"Hoy la inocuidad, la sustentabilidad y la trazabilidad no son opcionales. Son condiciones de acceso a mercados y de respaldo a toda la cadena agroexportadora", señaló Dos Santos.
¿Qué haría este veterinario corresponsable?

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Asesoraría técnicamente a los productores en planes sanitarios.
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Supervisaría el uso de zooterápicos, con enfoque en la inocuidad del producto final.
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Colaboraría con el MGAP, INAC y el SNIG, integrando datos sanitarios de forma estructurada.
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Facilitaría un control más profesional y sostenido de las enfermedades que afectan al rodeo.
SANIDAD COMO PATRIMONIO NACIONAL
Durante las jornadas, también participó el ministro de Ganadería, Alfredo Fratti, quien respaldó la idea al afirmar que la salud animal es patrimonio nacional. Señaló que su deterioro no solo compromete la producción, sino que también afecta los ingresos, el empleo y el posicionamiento de Uruguay como país confiable en exportación de alimentos.
¿Cambia esto el futuro del campo?
El modelo sería voluntario y progresivo, pensado para integrarse gradualmente al sistema productivo. Su implementación permitiría:
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Optimizar la respuesta sanitaria nacional.
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Mejorar el estatus sanitario internacional de Uruguay.
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Posicionar la figura veterinaria como pieza clave en la calidad agroexportadora.