Chile declara oficialmente presente al nematodo de la frutilla y endurece el control en viveros
A partir del 9 de agosto, el SAG cambia el estatus del nematodo Aphelenchoides fragariae, que afecta a la frutilla, de cuarentenario ausente a plaga presente. Se intensifican las exigencias para viveros, con controles más estrictos y riesgo reglamentario para los que operen sin autorización.
Desde el 9 de agosto de 2025, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Chile declara al nematodo Aphelenchoides fragariae, causante del enanismo primaveral de la frutilla, como plaga presente, sustituyendo su anterior condición de plaga cuarentenaria ausente bajo régimen de emergencia.
El reconocimiento formal se sustenta en una distribución estable y persistente del organismo en zonas productoras, como la costa del Maule (Chanco y Pelluhue), donde las condiciones climáticas favorecen su proliferación.
Este nuevo estatus implica que solo viveros inscritos y autorizados por el SAG podrán producir y comercializar plantines de frutilla. Quienes adquieran material en viveros no certificados arriesgan adquirir plantas infestadas y pierden respaldo legal ante eventuales daños o discrepancias varietales.
Acción intensificada en viveros y estrategias de protección fitosanitaria
El SAG ordena reforzar las medidas fitosanitarias en viveros frutilleros, clave en la prevención de la dispersión de la plaga, ya que el material de propagación es su principal vía de transmisión.
Desde 2022, bajo emergencia fitosanitaria, se activaron múltiples acciones: mesas público-privadas, mayor capacidad analítica en laboratorios, prospecciones territoriales y uso especial de plaguicidas autorizados para emergencia. Estas acciones continuarán vigentes, ajustadas al nuevo contexto regulatorio.
Paralelamente, el INIA, con apoyo del SAG y la FIA, ha capacitado a productores en el manejo integrado del nematodo: eliminación de plantas infectadas, control de malezas hospedantes, desinfección de herramientas, riego por goteo, rotación con cultivos no hospedantes (como brócoli) y uso de técnicas culturales que minimizan el impacto.
Una nueva era para la frutilla: hacia la sanidad y calidad exportadora
La transformación del estatus fitosanitario marca un hito en la protección de la fruticultura nacional, permitiendo avanzar desde una mirada emergencial hacia un régimen institucional estable y regulado.
Los viveros deben ajustarse rápidamente: solo los certificados garantizarán la entrega de plantas libres de nematodo y respaldo institucional en caso de fallas fitosanitarias o de variación varietal.
Con la declaratoria de la plaga presente, se allana el camino para una regulación sostenible y sistemática, enfocada en preservar la producción de frutilla de alta calidad sanitaria, requisito esencial para mercados exigentes y para impulsar la competitividad del sector frutícola chileno.