Azúcar en crisis: fuerte baja de precios presiona márgenes industriales en Brasil
La caída del azúcar reconfigura el tablero agroexportador: preocupación por el impacto en la balanza comercial y la competitividad del sector sucroenergético.
Los precios internacionales del azúcar experimentan una fuerte retracción, generando un escenario de alta tensión para las agroindustrias brasileñas. Según datos del mercado y referentes del sector, los márgenes de beneficio para los ingenios azucareros se están estrechando rápidamente, justo cuando se esperaba una cosecha récord. Esta dinámica, que afecta directamente a la cadena de valor agroalimentaria, pone en alerta a otros países productores de América Latina y reaviva el debate sobre la diversificación de mercados, la integración regional y la sustentabilidad del modelo sucroenergético.
Un mercado en retroceso: el precio del azúcar cae casi 30% en 12 meses.
Según estimaciones del sector, el precio del azúcar crudo negociado en la Bolsa de Nueva York (ICE) retrocedió cerca de un 30% en los últimos doce meses, lo que representa su nivel más bajo desde fines de 2022. A pesar de que la cosecha brasileña 2024/2025 se perfila como una de las más abundantes, la sobreoferta global, sumada a la desaceleración en la demanda asiática y la competencia de países como India y Tailandia, empujó los precios a la baja.
Este contexto ha generado una reducción significativa en los márgenes de ganancia para las industrias procesadoras de caña, que enfrentan además costos operativos crecientes y desafíos logísticos en zonas clave de producción como São Paulo, Goiás y Mato Grosso do Sul.
Brasil representa más del 50% de las exportaciones mundiales de azúcar, y las dinámicas de su mercado interno repercuten en toda América Latina, especialmente en países como Colombia, Guatemala, Argentina y Perú. Esta caída de precios puede traducirse en dificultades para mantener niveles de rentabilidad, reprogramación de inversiones y presiones fiscales para el sector.
Además, la coyuntura pone en evidencia la vulnerabilidad de las economías dependientes de commodities agrícolas, que enfrentan barreras arancelarias y no arancelarias crecientes, así como fluctuaciones en la demanda internacional impulsadas por el cambio climático y las nuevas tendencias de consumo.
Tecnificación, biocombustibles y el dilema del etanol
Frente al deterioro de los precios del azúcar, muchos ingenios brasileños están redirigiendo parte de la caña hacia la producción de etanol, buscando mejorar el rendimiento económico de sus operaciones. Sin embargo, esta estrategia enfrenta desafíos de infraestructura, incertidumbre normativa y un mercado interno con demanda oscilante.
En este escenario, la tecnificación del sector sucroenergético, junto con iniciativas de trazabilidad, eficiencia energética y agricultura digital, emergen como caminos necesarios para recuperar competitividad y atraer inversión internacional.
¿Está preparada América Latina para un nuevo ciclo del mercado azucarero?
La actual caída del precio del azúcar no es solo una fluctuación estacional: marca un posible cambio de ciclo en la dinámica global del comercio agroindustrial. Para América Latina, el desafío es múltiple: adaptarse a los nuevos precios, agregar valor en origen, diversificar mercados y avanzar hacia modelos más resilientes y sostenibles.