El potencial exportador de América Latina enfrenta un hito clave: Guatemala está en la recta final para habilitar la exportación de aguacateHass a Estados Unidos, tras lograr la admisibilidad en noviembre de 2024 y avanzar ahora en los términos del Plan Operativo de Trabajo (POT) junto al USDA. Este paso podría abrir un mercado estratégico para la agroindustria regional, con altos estándares de calidad, trazabilidad y sanidad vegetal.

El POT define las responsabilidades de ambos países para garantizar exportaciones seguras y reguladas. El MAGA, a través de la Dirección de Sanidad Vegetal, se encargará de registrar las fincas, supervisar las plantas empacadoras, coordinar el muestreo fitosanitario y emitir los certificados oficiales. Por su parte, el APHIS (Departamento de Agricultura de EE.UU.) se ocupará de la inspección en origen y destino, así como del soporte técnico.

Este protocolo busca garantizar uniformidad, trazabilidad y cumplimiento de los requisitos de inocuidad alimentaria que exige el mercado estadounidense.

Proyecciones de exportación y nuevas inversiones

Desde su admisibilidad, Guatemala proyecta exportar al menos 3.000 toneladas de aguacate Hass durante 2025, lo que equivale a unos 15 a 20 contenedores en la primera etapa. A su vez, se inauguró una nueva empacadora con capacidad para procesar 32 toneladas por hora, generando más de 1.000 empleos directos en Santa Rosa. Esta infraestructura responde a las exigencias logísticas y sanitarias del comercio internacional de alimentos frescos.

Trazabilidad, sanidad vegetal y nuevos mercados

Guatemala dispone de 56 fincas bajo monitoreo fitosanitario intensivo para garantizar el cumplimiento de los protocolos internacionales. Esto no solo fortalece la seguridad alimentaria, sino que posiciona al país como un proveedor confiable en términos de certificación, trazabilidad y control de plagas cuarentenarias.

La apertura del mercado estadounidense también puede derivar en nuevas oportunidades para ingresar a otros mercados de alto valor, como Canadá, Asia y Europa, donde la demanda por productos frescos con certificación de origen y buenas prácticas agrícolas sigue creciendo.

El ingreso del aguacate Hass guatemalteco a EE.UU. no es solo un avance bilateral: es un caso testigo para toda América Latina. Superar la firma final del POT significará mucho más que abrir un mercado: es consolidar un modelo de gobernanza fitosanitaria, tecnificación agroindustrial y articulación público-privada capaz de competir globalmente. La cuenta regresiva comenzó, y los ojos del comercio agrícola regional están puestos en Guatemala.