Brasil busca acuerdo con EE. UU. para reducir aranceles al café y la maquinaria
Tras la reunión entre Mauro Vieira y Marco Rubio, los sectores de café y maquinaria brasileños esperan una tregua comercial que revierta el aumento del 40 % en las tarifas.
El Gobierno de Brasil y representantes del sector productivo manifestaron optimismo tras la reciente reunión entre el ministro de Relaciones Exteriores, Mauro Vieira, y el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, que abrió una nueva etapa de diálogo para revisar los aranceles comerciales aplicados a las exportaciones brasileñas de café y maquinaria.
Según fuentes del encuentro, ambos países acordaron mantener una agenda de trabajo bilateral orientada a la reducción de tarifas, el fortalecimiento de la cooperación tecnológica y la búsqueda de equilibrio en temas sensibles como minerales críticos, innovación digital y la situación de Venezuela.
El encuentro, celebrado en el marco de la reactivación de los lazos económicos entre ambos gobiernos, generó expectativas positivas en sectores que se vieron afectados por el incremento arancelario implementado por Estados Unidos a mediados de año.
Industria y café: sectores clave en la negociación
Para José Velloso, presidente ejecutivo de la Asociación Brasileña de la Industria de Maquinaria y Equipos (Abimaq), la reunión cumplió con las expectativas al abrir "un canal directo de negociación con instancias cercanas a la administración estadounidense".
"La petición de Brasil es que cese el 40 % adicional en las tarifas y que el valor vuelva al nivel del 10 % durante las negociaciones. Veo una gran posibilidad de que esto ocurra", afirmó Velloso, quien resaltó que la reapertura de canales diplomáticos permite avanzar hacia una tregua comercial temporal mientras se define un acuerdo definitivo.
El dirigente añadió que las conversaciones no se limitan al comercio de bienes industriales, sino que incluyen temas de innovación tecnológica y cooperación estratégica, destacando el papel de Brasil como proveedor de maquinaria agrícola, equipos de transporte y tecnología intermedia para la industria estadounidense.
Por su parte, Márcio Ferreira, presidente del Consejo de Exportadores de Café de Brasil (Cecafé), celebró el tono constructivo del diálogo y la posibilidad de lograr una exención arancelaria para el café brasileño, el cual enfrenta una competencia creciente en el mercado norteamericano.
"Estados Unidos y Brasil no pueden caminar por separado. Esta reducción dejaría espacio para que otros países ocupen el mercado. El consumidor estadounidense no debería acostumbrarse a los cafés sin el perfil brasileño", señaló Ferreira.
El titular de Cecafé subrayó que el mercado estadounidense consume principalmente cafés arábica y conilon, además de productos solubles adaptados a la industria local. En ese contexto, la reducción arancelaria es clave para preservar la competitividad del café brasileño, especialmente frente a exportadores centroamericanos y africanos.
Tanto Abimaq como Cecafé coincidieron en que el reciente diálogo ofrece una oportunidad de tregua durante las negociaciones, lo que permitiría mantener suspendidos los aranceles adicionales mientras se discuten acuerdos que beneficien tanto a la industria estadounidense como a la agroindustria brasileña.
"Sería excelente si Estados Unidos aceptara abrir las negociaciones con esta tregua en los aranceles. No lo descarto", expresó Velloso, al anticipar que los avances podrían consolidarse en una eventual reunión entre los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Donald Trump, prevista durante el viaje oficial de Brasil a Asia.
Ferreira agregó que la intención de Brasil es lograr la exención total de aranceles y restablecer la igualdad de condiciones con otros productores, manteniendo el diálogo con el sector privado norteamericano y con autoridades de comercio.
Mientras tanto, Cecafé confirmó una reunión con el vicepresidente y ministro de Industria y Comercio, Geraldo Alckmin, programada para el próximo 22 de octubre, a fin de definir los lineamientos técnicos y comerciales que acompañarán las conversaciones con Washington.
Los avances en estas negociaciones son observados de cerca por los mercados agrícolas y manufactureros, que ven en un posible acuerdo bilateral una señal de distensión y cooperación económica entre las dos mayores economías del hemisferio occidental.