Exportaciones de Colombia a Estados Unidos caen 13,7% en agosto por efecto de aranceles y baja del petróleo
Las ventas externas al principal socio comercial se redujeron a US$1.090 millones, impactadas por el menor envío de combustibles y la aplicación de aranceles estadounidenses.
Las exportaciones colombianas hacia Estados Unidos registraron en agosto una caída interanual del 13,7 %, al totalizar US$1.090,6 millones, frente a los US$1.263 millones del mismo mes de 2024, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE). El descenso estuvo liderado por la contracción en las ventas de petróleo y combustibles, junto con los aranceles aplicados por el gobierno de Donald Trump a productos latinoamericanos.
Aunque el valor total de las exportaciones del país sumó US$3.842 millones, con una baja marginal del 0,1 % interanual, la pérdida de dinamismo en el mercado estadounidense -que representa el 28,4 % del total de ventas externas- evidencia la vulnerabilidad del comercio colombiano ante las políticas de protección económica norteamericana.
Petróleo, el gran ausente en las ventas externas
El DANE detalló que las exportaciones de petróleo sufrieron una caída del 32,9 %, el nivel más pronunciado del año. En agosto de 2024, Colombia había vendido a Estados Unidos combustibles para calderas (fuel oils) por US$54,8 millones, pero en el mismo mes de 2025 no se registró ningún envío de ese producto, lo que profundizó la baja de ingresos.
El presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), Javier Díaz, advirtió que las cifras reflejan un deterioro estructural. "Las noticias de exportaciones no son buenas. En el caso de Estados Unidos, la caída es consecuencia de los aranceles que ya empiezan a sentirse con fuerza, como parte de una política de protección de su mercado interno", señaló.
Por su parte, David Cuides, jefe de investigaciones económicas, explicó que la contracción de dos dígitos responde a la combinación de menores precios internacionales del petróleo y del carbón. "Estamos viendo que ambos rubros retroceden. Los precios internacionales han caído, y eso explica la disminución de los ingresos por exportaciones", precisó.
A pesar de este escenario, Cuides consideró que el balance anual todavía muestra una cierta estabilidad en las ventas totales, gracias al desempeño de otros sectores que compensan parcialmente las pérdidas del energético.
Los combustibles y aceites minerales siguen siendo el principal producto exportado a Estados Unidos, con US$3.466 millones entre enero y agosto, aunque con tendencia a la baja. Le siguen las plantas vivas y productos de floricultura con US$1.365 millones, el café, té y yerba mate con US$1.434 millones, y las perlas y metales preciosos con US$853 millones.
En menor medida, los frutos comestibles, las materias plásticas y las preparaciones alimenticias aportaron entre US$170 y US$393 millones, mientras que los sectores industriales, como calderas, máquinas y prendas de vestir, mantienen participación limitada.
El balance general con corte a agosto muestra que las exportaciones totales del país acumulan US$30.384 millones en lo que va del año, un descenso del 6 % respecto al mismo período de 2024, con variaciones mensuales que evidencian una tendencia descendente desde marzo.
Caída también hacia China
El debilitamiento del comercio exterior no se limita a Estados Unidos. En agosto, las exportaciones hacia China también se redujeron un 46,4 % interanual, al pasar de US$217,6 millones en 2024 a US$116,6 millones este año. La principal razón fue la ausencia de exportaciones petroleras, que el año pasado aportaron US$130 millones al total.
Esta combinación de menor demanda de materias primas y nuevos aranceles desde Washington genera preocupación en el sector exportador, que teme un impacto sostenido sobre la balanza comercial y la recaudación fiscal por ventas externas.
Pese a la baja de los combustibles, los productos agrícolas mostraron comportamientos positivos. Las exportaciones de café, flores y frutas mantuvieron su dinamismo y ayudaron a amortiguar la caída global. "El buen desempeño del agro no alcanza para compensar la pérdida de los energéticos, pero demuestra que el sector rural sigue siendo el más estable del país", destacó Díaz.
En ese contexto, el desafío para Colombia será diversificar su oferta exportadora y reducir la dependencia de los combustibles fósiles, especialmente frente a un escenario internacional más restrictivo.