Productores de Lara negocian exportación de frutas a Rusia, República Checa y Turquía
El sector agrícola del estado Lara busca abrirse paso en mercados internacionales con un plan que proyecta 140 toneladas de fruta destinadas a Europa del Este y Asia, en coordinación con organismos oficiales.
La exportación de frutas venezolanas podría dar un nuevo salto con la proyección de envíos desde el estado Lara hacia Rusia, República Checa y Turquía, mercados que han mostrado interés en consolidar relaciones con productores locales.
La atención de estos países se ha generado por la forma en que se trabajan las tierras en Venezuela, según explicaron agricultores de la región. Consideran que la iniciativa no solo ampliará los destinos de la producción, sino que también representará un beneficio directo para el sector primario y la economía nacional.
El productor larense Arístides Martínez confirmó que existen alianzas ya establecidas con el gobierno ruso, además de acuerdos preliminares con la República Checa y negociaciones en curso con Turquía. "La intención de este ambicioso proyecto es la exportación de nuestro producto", afirmó, destacando que el proceso se realiza en coordinación con organismos del Estado para facilitar la logística y los trámites correspondientes.
De concretarse los convenios, los destinos señalados recibirían 140 toneladas de frutas, cifra que permitiría a Lara consolidarse como un proveedor confiable en mercados de Europa del Este y Asia. Aunque no se han especificado los tipos de fruta que integrarán los primeros cargamentos, se espera que incluyan rubros de alta demanda internacional como mango, guayaba, piña y papaya, productos ya posicionados en el comercio exterior venezolano.
La estrategia busca diversificar los mercados más allá de los destinos tradicionales en América Latina y el Caribe, apostando por un posicionamiento más competitivo de las frutas venezolanas en cadenas internacionales de distribución. Para los productores, se trata de una oportunidad de elevar ingresos, generar empleo rural y consolidar una red de comercialización más amplia.
El estado Lara, con condiciones agroecológicas favorables y una larga tradición agrícola, se perfila como un polo clave para la exportación de frutas frescas. Sin embargo, los productores advierten que será necesario garantizar infraestructura adecuada de refrigeración, transporte y certificaciones fitosanitarias para cumplir con las exigencias de los mercados europeos y asiáticos.
Con este proyecto en marcha, el campo larense se proyecta más allá de las fronteras, con el objetivo de convertir a la fruta venezolana en embajadora de la producción agrícola nacional y abrir una vía estable de ingresos para las comunidades rurales.