Soja en alza: China reactiva compras y el precio toca los u$s400, ¿qué significa para la Argentina?
El repunte en Chicago tras nuevas compras chinas de soja reacomoda el mercado global. En Argentina, el impacto podría ser acotado, pero positivo.
La soja volvió a los u$s400 por tonelada en el mercado de Chicago, impulsada por el anuncio del secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, quien confirmó que China comprará hasta 12 millones de toneladas de soja hasta enero y alrededor de 25 millones anuales durante los próximos tres años. La noticia trajo alivio a los productores norteamericanos, aunque los analistas advierten que no representa un cambio estructural en el comercio global del grano.
Las declaraciones de Bessent llegaron tras la reunión bilateral entre Donald Trump y Xi Jinping, en la que el expresidente estadounidense celebró en redes el retorno del gigante asiático como comprador: "Nuestros agricultores estarán muy contentos", escribió. Tras el anuncio, los futuros de Chicago revirtieron una caída del 1% y superaron los u$s400, aunque luego moderaron la suba. El cierre marcó un alza del 1%, a u$s400,96 por tonelada.
La analista agropecuaria Marianela de Emilio señaló que el acuerdo "abre la puerta a un mercado un poco más normal", pero aclaró que "lo único que logra es restablecer el ritmo previo de comercio, que tampoco era el mejor". A su vez, el consultor Javier Preciado sostuvo que "para el productor estadounidense es una buena noticia: están cosechando y lo tienen al principal comprador de su producto", aunque coincidió en que el panorama de largo plazo sigue siendo incierto.
Desde 2018, cuando estalló el conflicto arancelario entre Washington y Pekín, China fue reduciendo su dependencia de la soja estadounidense, lo que cambió la dinámica del mercado. Hoy mantiene sus compras en torno a 110 millones de toneladas anuales, sin señales de expansión. "El poder lo tiene el país importador", subrayó Preciado, y agregó que el gigante asiático seguirá diversificando proveedores, lo que mantendrá presión sobre los precios internacionales.
El regreso de Estados Unidos como proveedor activo implica una noticia bajista para el Mercosur, aunque más para Brasil que para Argentina. "Brasil exporta principalmente poroto, mientras que Argentina vende más harina y aceite", explicó Preciado. En esa línea, De Emilio destacó que "si Chicago mejora, Argentina mejora. Estos días subimos precios porque seguimos la tendencia, aunque con menor intensidad".
Así, el movimiento de China reordena temporalmente el tablero global de la soja, con alivio para los farmers estadounidenses y una leve mejora para el agro argentino, que mantiene su competitividad gracias a la industrialización del complejo sojero. En Brasil, en cambio, se espera una baja en los precios hasta la llegada de la nueva cosecha.

