USDA data signals monopoly threat in rural grocery networks
New USDA findings show alarming levels of grocery market concentration in rural areas. The trend jeopardizes farmer incomes, local food systems, and community resilience.
Un análisis reciente del USDA revela que los mercados rurales de comestibles se han concentrado significativamente, lo que genera inquietudes para los agricultores, las cadenas de suministro y las comunidades rurales. Este cambio amenaza la competencia, el acceso a alimentos frescos y la viabilidad de los pequeños productores.
Concentración del mercado en aumento
En 1990, las cuatro principales cadenas de supermercados -Walmart, Kroger, Costco y Ahold Delhaize- representaban aproximadamente el 13 % de las ventas nacionales de comestibles. Para 2019, su participación combinada se disparó al 34 %. En los condados rurales, la concentración -medida por el Índice Herfindahl-Hirschman (IHH)- aumentó de 3104 en 1990 a 5584 en 2019, más del doble del umbral de 2500 que indica riesgo de monopolio.

Fuente: Informe del USDA ERS Una visión desagregada de la concentración del mercado en la industria minorista de alimentos • gráfico de Lauren Cross, Investigate Midwest
El Índice Herfindahl-Hirschman (HHI) es una herramienta que utilizan los reguladores para rastrear el riesgo de monopolio. Un mercado perfectamente competitivo podría tener una puntuación cercana a 1000, mientras que un monopolio alcanza los 10 000. La línea naranja punteada representa el umbral de 2500 HHI utilizado por los reguladores federales para identificar mercados altamente concentrados.
Implicaciones para los agricultores y las comunidades rurales
La menor competencia implica menos puntos de venta para frutas, verduras, lácteos y productos agrícolas de valor añadido locales, lo que podría reducir los precios que pagan los agricultores. Los agricultores podrían tener dificultades para diversificar sus canales de comercialización a medida que desaparecen los transportistas independientes y regionales. Los condados rurales corren el riesgo de convertirse en desiertos alimentarios, donde el acceso limitado a los supermercados incrementa los precios de los alimentos y obliga a los residentes a recurrir a tiendas de conveniencia más caras.
Los recortes presupuestarios podrían empeorar las perspectivas
El gobierno de Biden ha propuesto recortes presupuestarios del USDA por casi 7 mil millones de dólares, incluyendo una reducción del 45 % en la financiación del Servicio de Cooperativas Empresariales Rurales. Estos recortes amenazan las subvenciones y préstamos destinados a apoyar el desarrollo de supermercados locales. Simultáneamente, las reducciones en programas como el WIC, la infraestructura de comidas escolares y las iniciativas de la granja a la escuela podrían reducir la demanda de alimentos de producción local.
Desafíos y respuestas estratégicas
Es probable que la presión sobre los precios aumente a medida que los agricultores pierdan poder de negociación frente a los gigantes minoristas. La reducción de los puntos de venta obliga a los productores a desplazarse más lejos o a utilizar canales de distribución más caros. El fortalecimiento de las cooperativas agrícolas y la formación de alianzas locales pueden contribuir a la creación de redes de distribución alternativas, desde programas de agricultura climáticamente inteligente (CSA) hasta mercados digitales.
Los defensores argumentan que impulsar el Desarrollo Rural del USDA, restablecer la financiación de las cooperativas y reforzar los programas de la granja a la institución son esenciales para contrarrestar la consolidación del comercio minorista. Sin intervención, las comunidades rurales podrían enfrentar una disminución del acceso a los alimentos y un estancamiento económico. Por el contrario, revitalizar los sistemas locales de alimentación podría promover la seguridad alimentaria, el desarrollo rural y la rentabilidad agrícola.