La nueva edición del índice "Ag Barometer Austral", elaborado por el Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, revela que por primera vez, desde que se elabora este índice, los productores argentinos ven con igual pesimismo el futuro que la situación presente.
Luego del triunfo electoral de Alberto Fernández en las elecciones presidenciales de octubre y, a días de su asunción, el índice de confianza de los productores agropecuarios alcanzó un mínimo histórico en el último mes, al llegar a 64, registrando una baja del 14% respecto de la medición de septiembre de este año, luego de haber alcanzado en julio el máximo de 137.
La encuesta reveló que el 79% de los productores agropecuarios considera que no es propicio realizar inversiones en el escenario actual, mientras que el 76% piensa que los próximos 12 meses "serán malos tiempos financieros para el sector".
El relevamiento se hizo sobre 400 productores con un valor bruto de producción igual o mayor a 200.000 dólares. Cuando los valores de la encuesta superan a 100, significa que las percepciones positivas superan a las negativas, y al contrario sucede cuando el valor se ubica por debajo de 100.
Desde la organización afirman que en esta medición está impactando la incertidumbre política que genera la llegada de un nuevo gobierno, además un posible aumento de las retenciones. Dentro de este contexto, se tiene en cuenta que en el seno del equipo de Alberto Fernández estaría en estudio un incremento del impuesto para el complejo sojero, granos y carne vacuna.
Otro de los alcances de la investigación es que a los productores también les preocupa el financiamiento, el acceso al crédito, y las cuestiones climáticas
Este escenario de elevada incertidumbre ha derivado en una aceleración de la comercialización de la producción agrícola de la actual campaña. Los datos oficiales muestran que hasta el momento se ha comercializado el 16% de la soja, contra un 9% promedio a esta misma altura del año en 2018; el 26% del maíz contra un 12% promedio en 2018 y un 45% del trigo, contra un 22% promedio del año pasado.
Además, el relevamiento de la Universidad Austral sostiene que el 70% de los productores decidió realizar algún tipo de operación de cobertura, ya sea a través de forwards o de mercados institucionalizados. Y cuando se les preguntó si estas herramientas las habían utilizado en mayor o menor medida que lo habitual, más de la mitad apuntó que incrementaron su uso.
Perspectivas actuales y futuras
-A pesar de las malas expectativas y la incertidumbre en torno a la cuestión política, más de la mitad de los productores expresó la voluntad de mantener la productividad y el paquete tecnológico, ya que un 25% piensa aumentar la inversión en tecnología por hectárea, y solamente un 14% de los productores piensa invertir menos.
-Otro de los resultados de la encuesta, sostiene que el 39% de los productores que respondieron la misma están en lo financiero peor en relación a un año atrás, mientras que el 79% de los productores sostienen que es un mal momento para realizar inversiones.
-En relación a las expectativas futuras un 55% de los productores consideró que de aquí a 12 meses sus empresas "van a estar peor financieramente" mientras que el 76% sostuvo que "serán malos tiempos financieros para el total del sector agropecuario"; proyección que baja al 61% para los próximos 5 años.
Ganadería
Por último, los productores manifestaron ser optimistas en cuanto a la rentabilidad de las actividades ganaderas, con la excepción de los feedlots, donde los márgenes han caído como resultado de una relación desfavorable gordo/invernada y la relación de precios granos/hacienda gorda.
"Todos estos factores provocaron que el porcentaje de ocupación de los feedlots sea bajo y hace presumir una menor oferta de hacienda para faena en los próximos meses", comentaron los especialistas de la Universidad Austral.
Además, existe la percepción de riesgo frente a las autoridades que asumirán el 10 de diciembre, ya que hay temor entre los productores ganaderos que se vuelva a aplicar restricciones para la comercialización, lo que podría alterar el panorama optimista que reflejó la encuesta de noviembre pasado.
