Una intensa sequía repentina azotó el Delta y el sur del Medio Oeste en agosto de 2025, reduciendo las precipitaciones, intensificando el calor y acelerando la maduración de los cultivos, probablemente a costa del rendimiento.

Los pronósticos sugieren que lluvias moderadas o intensas podrían cerrar el mes , pero para muchos productores, el daño ya está hecho. El meteorólogo agrícola de DTN, John Baranick, señaló el 25 de agosto que « el clima de finalización del maíz y la soja ha sido malo en la región y podría haber provocado una reducción de los rendimientos » .

La rápida aparición y la gravedad de esta sequía han tomado a muchos por sorpresa. A finales de julio, la región se encontraba libre de sequía , pero en tres semanas, se han presentado sequías repentinas en Arkansas, Misuri, Kentucky, Tennessee y Misisipi.

El Monitor de Sequía de EE. UU. reportó condiciones generalizadas de Sequía Anormal (D0) y Sequía Moderada (D1) . Arkansas es uno de los estados más afectados , con casi todo el estado clasificado como anormalmente seco o peor , incluyendo focos de Sequía Severa (D2) en condados del centro y noreste.

Este patrón se ajusta a la definición de sequía repentina , un tipo de sequía que se caracteriza por su rápida aparición e intensificación , generalmente en cuestión de días o semanas. Las precipitaciones han sido muy inferiores a lo normal: Little Rock, Arkansas, registró solo 0,01 pulgadas de lluvia entre el 1 y el 25 de agosto , en comparación con el promedio de 2,54 pulgadas.

El estrés en los cultivos es evidente en las tasas de madurez reportadas en los datos de progreso de cultivos del USDA NASS al 25 de agosto:

• La madurez del maíz de Missouri aumentó del 3% al 15% en una semana (un aumento de 5x).

• La madurez del maíz de Kentucky aumentó del 4% al 25%.

• La madurez del maíz de Tennessee aumentó del 11% al 36%, muy por encima del promedio de cinco años.

• La caída de hojas de soja en Arkansas alcanzó el 23% , muy por encima del promedio del 17%.

• La caída de hojas de soja en Mississippi alcanzó el 39%, en comparación con el promedio del 25%.

Estos rápidos acontecimientos sugieren que los cultivos están madurando prematuramente debido al estrés, que no es el óptimo para el crecimiento. Si bien se pronostica el regreso de las lluvias, podría ser demasiado tarde para revertir las pérdidas de rendimiento.

A medida que se acerca la cosecha, tanto productores como analistas estarán atentos para evaluar cuánto potencial de rendimiento se perdió durante esta breve pero severa sequía. Para los productores del sur del Cinturón del Maíz y el Delta, el clima de agosto de 2025 podría servir como ejemplo de la rapidez con la que la situación puede cambiar bajo condiciones de sequía repentina.