México perfila su ingreso al top 5 mundial del café: más producción y valor rural
Con un programa centrado en duplicar la producción y fortalecer a 350000 caficultores, México busca escalar posiciones en el ranking global y consolidar su sello de calidad sostenible.
México, a través de su Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), ha presentado el plan "Soberanía Cafetalera", cuyo objetivo es aumentar la producción de café de 4 a 8 millones de sacos de 60kg para 2030. De esta forma, el país pretende ubicarse entre los cinco principales productores mundiales, partiendo desde su actual novena o décima posición.
Para materializar esta ambición, se ha destinado una inversión de 1200 millones de pesos mexicanos (aproximadamente 62,6 millones de USD), que beneficiará a más de 350000 productores, quienes contarán con recursos para la renovación de cafetales, acceso a mercados diferenciados y esquemas de cobertura de precios que protejan su rentabilidad en un contexto de volatilidad global.
El programa también incluye capacitación técnica mediante escuelas de campo, el plan de fertilizantes gratuitos, y alianzas público-privadas orientadas a mejorar la productividad y la resiliencia fitosanitaria del sector. Además, el plan busca elevar el consumo interno a 2kg de café per cápita y abrir nuevos mercados en destinos como Corea del Sur, China, Japón, Australia y Nueva Zelanda.
La producción nacional de café arábica durante el ciclo de 2023 fue de cerca de 3,87 millones de sacos, siendo Chiapas, Veracruz, Oaxaca y Puebla las principales zonas productoras. Actualmente, México se ubica entre los cinco mayores productores de café arábica a nivel mundial.
No obstante, el sector enfrenta desafíos estructurales relevantes: cambios en el clima, predios pequeños, bajos precios internacionales y cadenas dominadas por intermediarios. El fortalecimiento técnico de los productores y el respaldo financiero resultan clave para mejorar la competitividad y mejorar la balanza comercial del café mexicano.
La estrategia adoptada combina agricultura digital, sistemas agroforestales y certificaciones orgánicas, con el fin de posicionar al café mexicano como un referente global de calidad sostenible con impacto social y ambiental, más allá de la tradicional producción local.
El plan "Soberanía Cafetalera" representa una hoja de ruta ambiciosa para transformar la caficultura de México. Si se mantiene el impulso, en 2030 el país no solo duplicará su producción, sino que también consolidará una industria cafetera moderna, resiliente y competitiva en los mercados internacionales.
