América Latina

Singapur invertirá US$ 76 millones en créditos de carbono basados en la naturaleza en Ghana, Perú y Paraguay

En Latinoamérica, se busca proteger bosques en Perú y mejorar el manejo ganadero en Paraguay, integrando a comunidades rurales en la transición hacia prácticas sostenibles.

En un paso decisivo hacia la descarbonización, Singapur anunció la compra de créditos de carbono por US$ 76,4 millones, provenientes de proyectos de conservación y restauración en Perú, Paraguay y Ghana. Esta es la primera vez que la nación asiática adquiere créditos de origen estrictamente basados en la naturaleza, reforzando su estrategia climática hacia 2030.

La operación, comunicada por la Secretaría Nacional de Cambio Climático y el Ministerio de Comercio e Industria de Singapur, permitirá compensar 2,175 millones de toneladas de dióxido de carbono, equivalentes a cerca del 4% de las emisiones nacionales registradas en 2022.

Proyectos en Perú: frenar la deforestación amazónica

En el caso de Perú, dos proyectos apuntan a proteger áreas boscosas clave frente al avance de la agricultura y los incendios. Uno busca preservar la biodiversidad en el Parque Nacional Yanachaga Chemillén y en el Bosque de Protección San Matías-San Carlos, mientras que otro se concentra en reducir la deforestación en la región de Madre de Dios, un territorio crítico para la Amazonía.

Ambas iniciativas se enmarcan en el esquema REDD+ (Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de Bosques), que monetiza las emisiones evitadas mediante la generación de créditos de carbono, creando un incentivo financiero para conservar la cobertura forestal.

Paraguay: ganadería sostenible en los pastizales

El proyecto en Paraguay se centra en el manejo de los pastizales del Chaco y la región pampeana, donde la ganadería extensiva ha generado sobrepastoreo y pérdida de la capacidad de captura de carbono en los suelos. La iniciativa promueve rotación de pastoreo, conservación de agua y control de quemas, con el fin de regenerar la cubierta vegetal y aumentar la fijación de carbono.

Este enfoque es particularmente relevante en un país donde la ganadería es motor económico y social, y donde la adopción de prácticas sostenibles puede abrir nuevas oportunidades en mercados internacionales que exigen trazabilidad ambiental en la carne y sus derivados.

Ghana: restaurar bosques tropicales degradados

En Ghana, el proyecto apunta a recuperar 51.000 hectáreas de bosques tropicales degradados en la región de Kwahu, donde la expansión de cultivos de cacao y la tala indiscriminada redujeron la superficie forestal a menos de dos millones de hectáreas. El plan, a 40 años, incluye reforestación con especies nativas, agroforestería y plantaciones regenerativas que beneficien tanto al ambiente como a las comunidades agrícolas.

Cada crédito de carbono equivale a una tonelada de CO que se evita emitir o se retira de la atmósfera, y forma parte de los mecanismos reconocidos por el Acuerdo de París. Países como Singapur pueden comprar créditos generados en otras jurisdicciones con las que tienen acuerdos de cooperación, como ocurre con Perú, Paraguay y Ghana.

La compra también responde a los compromisos de Singapur de utilizar créditos de alta calidad para compensar 2,51 millones de toneladas de emisiones anuales hacia 2030, reduciendo así su huella climática en sectores donde la mitigación directa resulta más difícil o costosa.

Para la región, esta operación representa una validación internacional de los proyectos de carbono basados en la naturaleza, que no solo aportan ingresos por conservación, sino que también involucran a comunidades rurales en el manejo sostenible de sus recursos.

En países como Perú y Paraguay, donde el agro es protagonista, estos esquemas permiten financiar prácticas de producción más resilientes frente al cambio climático y generan nuevas fuentes de ingresos vinculadas a la preservación de bosques y suelos.

Los especialistas señalan que los mercados voluntarios de carbono se están consolidando como un espacio en el que Latinoamérica puede jugar un rol clave, no solo como proveedor de alimentos, sino también como garante de servicios ecosistémicos globales.

Agrolatam.com
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