Alertan por riesgos sanitarios ante el aumento del sacrificio clandestino
La falta de rastros oficiales y controles sanitarios impulsa la matanza ilegal de ganado, generando riesgos para la salud pública y competencia desleal para los productores.
El sacrificio clandestino de ganado continúa siendo un problema grave en Aguascalientes, donde la falta de rastros oficiales suficientes y de controles sanitarios adecuados ha generado riesgos para la salud pública y pérdidas para el sector pecuario local.
La Unión Ganadera Regional Hidrocálida (UGRH) advirtió que esta práctica irregular se mantiene activa en distintas zonas del estado y que, pese a los esfuerzos de control, la carencia de infraestructura y supervisión sigue favoreciendo su expansión.
Desde la organización explicaron que el sacrificio clandestino se realiza sin inspecciones sanitarias, sin permisos de transporte ni medidas de bioseguridad, lo que representa un riesgo directo para los consumidores y para la inocuidad de la cadena cárnica.
Además de la posible contaminación de la carne, estas faenas ilegales generan competencia desleal frente a los productores que cumplen con las normas sanitarias y fiscales vigentes.
El gerente general de la UGRH, Salvador Arturo Hernández Zermeño, señaló que "el sacrificio clandestino es dañino porque no cumple con estándares de higiene. Los animales se matan y se distribuyen sin refrigeración ni control sanitario", lo que podría derivar en la propagación de enfermedades y afectaciones al consumo humano.
El dirigente explicó que muchos ganaderos han manifestado su preocupación por esta situación, pero evitan presentar denuncias por temor a represalias de quienes operan los mataderos ilegales. En los últimos meses, se han detectado casos no solo con ganado bovino, sino también con porcinos, principalmente en zonas rurales donde la vigilancia sanitaria es limitada.
La Unión Ganadera insistió en la necesidad de ampliar la red de rastros municipales y estatales que garanticen la trazabilidad y la inocuidad de los productos cárnicos. Estas instalaciones permitirían regularizar la faena, asegurar condiciones de higiene adecuadas y fortalecer la competitividad de los productores formales.
Desde el organismo señalan que el estado requiere una inversión sostenida en infraestructura sanitaria que acompañe el crecimiento del sector ganadero y permita cumplir con los estándares nacionales e internacionales en materia de inocuidad alimentaria.
La situación actual -subrayan- no solo compromete la seguridad de los consumidores, sino que también afecta la imagen del sector pecuario hidrocálido, que busca posicionarse como un proveedor confiable y competitivo dentro del mercado nacional.
La UGRH reiteró su disposición a colaborar con las autoridades estatales y municipales para diseñar mecanismos de control y certificación que erradiquen el sacrificio clandestino, al tiempo que se impulsa la modernización de los rastros existentes y la capacitación del personal vinculado al manejo sanitario del ganado.