Récord de dólares por el agro, pero a costa de pérdidas millonarias y un "subsidio" a China
Septiembre dejará hasta US$8000 millones por el agro, pero la suspensión de retenciones generó pérdidas millonarias y terminó beneficiando a China.
El campo volvió a mostrar su potencia: el ingreso de dólares por exportaciones agroindustriales cerraría septiembre entre US$7000 y US$8000 millones, impulsado por la suspensión temporal de los Derechos de Exportación (DEX). El viernes pasado, en una sola jornada, se registraron liquidaciones récord por US$1750 millones, una cifra sin precedentes para un solo día hábil.
El Gobierno había puesto un cupo de US$7000 millones para aprovechar las retenciones cero, pero esa cifra se cubrió en apenas 72 horas, en lo que analistas definieron como una "avalancha de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE)", en un 80% vinculadas al complejo sojero: harina, aceite, pellets y poroto.
Pero detrás del festejo por los dólares inmediatos aparece el costo estructural. Según datos oficiales, el esquema derivó en DJVE por 14,5 millones de toneladas de soja equivalente. El problema: en el mismo período los precios FOB de los subproductos argentinos se desplomaron en el mercado internacional. El poroto perdió US$16 por tonelada, la harina US$23 y el aceite US$54.
Esa baja de precios implica una pérdida superior a los US$90 millones solo en embarques de noviembre, pero el perjuicio puede ser mucho mayor a medida que avancen los meses. "Argentina terminó subsidiando a China y a otros compradores internacionales", remarcan consultoras privadas.
En el campo, la lectura es doble. Por un lado, la liquidación masiva le da aire a las reservas en un momento crítico para la economía. Por otro, los productores aseguran que pocos pudieron aprovechar realmente la medida, ya que fueron las exportadoras quienes concentraron las operaciones en tiempo récord. "El beneficio duró horas y después volvió la incertidumbre", señalaron.
Los analistas coinciden: septiembre será histórico, pero el alivio es transitorio. Octubre y noviembre traerán una merma en el ingreso de divisas -apenas entre US$1500 y US$2000 millones mensuales- hasta que la cosecha de trigo le dé algo de volumen en diciembre. Mientras tanto, Brasil se encamina a capturar los beneficios de precios más altos que Argentina resignó al cerrar operaciones con valores deprimidos.
En definitiva, el país celebra un récord de dólares inmediato, pero enfrenta el dilema de haber hipotecado parte del negocio a futuro.