"Las retenciones son peores que la peste, la inundación o la sequía",
En la inauguración de la Exposición Rural , el presidente de la SRA, Nicolás Pino, pidió eliminar las trabas impositivas, garantizar seguridad en zonas rurales y potenciar al INTA y al SENASA. "El campo no es un aliado partidario, es un aliado de la Argentina", aseguró.
En una tribuna colmada y con la bandera nacional flameando sobre la pista central, el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, inauguró la 137.ª Exposición Rural con un mensaje firme: "El campo no es un aliado partidario, es un aliado de la Argentina". En un discurso que combinó tono institucional y reclamos concretos, reclamó libertad para producir, el fin de las retenciones y mayor presencia del Estado en salud, seguridad y educación rural.
"El agro sabe lo que hay que hacer y sólo pide que lo dejen trabajar", dijo. Y advirtió que el sistema productivo podría duplicar su rendimiento si tuviera las condiciones necesarias. "No podemos perder otra oportunidad", enfatizó.
Un país más justo desde el interior
Pino destacó la necesidad de cambiar la lógica centralista que rige la economía argentina: "Tenemos que sacar a millones de personas del hacinamiento urbano y llevarlas de nuevo al interior productivo, donde está su historia", propuso. Para ello, pidió inversión en infraestructura, logística, caminos rurales, ferrocarriles y mantenimiento de la hidrovía. "Sin transporte, no hay posibilidad de crecer", sentenció.
Las retenciones, eje del malestar
Uno de los pasajes más duros del discurso estuvo centrado en las retenciones. "Desde 2002 aportamos más de 200.000 millones de dólares. ¿Dónde están? ¿Qué hicieron con ese dinero?", preguntó. Para Pino, los derechos de exportación no solo asfixian a las pymes del interior, sino que constituyen "un daño al bien común" y "una calamidad peor que la peste, la inundación o la sequía".
Aunque reconoció algunas mejoras -como la eliminación parcial de retenciones en economías regionales y la reducción temporal en ciertos granos-, recordó que el propio presidente Javier Milei se comprometió a suprimirlas por completo. "No queremos dudar de que cumplirá", dijo.
Seguridad y justicia rural
Pino también hizo foco en la inseguridad creciente en zonas rurales. Denunció el aumento de delitos como abigeato, caza ilegal y vandalismo sobre silos y cosechas. Reclamó fiscales especializados y presencia efectiva del Estado: "El campo ya no es un lugar pacífico. Necesitamos protección".
El rol del Estado y las instituciones
En varios tramos del discurso, el presidente de la SRA resaltó que el Estado no debe "reemplazar ni trabar" la iniciativa privada, sino facilitarla. Reclamó una reforma laboral que promueva el empleo formal y elimine la "industria del juicio". Además, pidió créditos a largo plazo para incorporar tecnología y una ley que permita atraer inversiones extranjeras al agro.
INTA, SENASA y la salud del sistema
Pino defendió el rol del INTA como herramienta científica del sector y pidió su fortalecimiento para liderar avances en biotecnología, inteligencia artificial y robótica. También reclamó una profunda reestructuración del SENASA para que se convierta en un organismo técnico de excelencia. "Un país exportador necesita un SENASA de nivel internacional", afirmó.
Sostenibilidad y marca país
En materia ambiental, sostuvo que Argentina debe monetizar su potencial sustentable. Anunció que la SRA impulsa una ley que reconozca la propiedad del carbono capturado por los productores y destacó el "Sello de Triple Impacto" como herramienta de certificación nacional. "Podemos dar las mismas garantías que cualquier país del mundo", aseguró.
Un cierre de bandera
Sobre el final, Pino se refirió a la defensa de la república, la propiedad privada y la justicia independiente. "No hay futuro con funcionarios que usan el poder para beneficio propio", lanzó, al criticar la mala praxis de gobiernos anteriores y exigir una política de "Ficha Limpia".
En un mensaje que buscó trascender lo gremial, concluyó con una arenga a la unidad: "Unámonos, no para pensar igual, sino para trabajar juntos. ¡Viva el campo argentino! ¡Viva la Argentina que no baja los brazos!".