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Récord con sabor amargo: el agro argentino estancado pese a la campaña gruesa histórica

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires proyecta casi 143 millones de toneladas para 2025/26, pero advierte que el campo no crece hace 7 años. Mientras Brasil expande su "market share", Argentina sigue atada a un esquema defensivo.

Las proyecciones de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires para la campaña gruesa 2025/26 pintan un cuadro que, en primera instancia, parece alentador: 143 millones de toneladas, exportaciones por US$ 32.000 millones y un salto del 9% respecto al ciclo previo.

Sin embargo, detrás del número se esconde un dato menos optimista. Para Ramiro Costa, economista jefe de la entidad, el récord en realidad expone una falencia estructural: "Hace 7 años que el agro no crece, estamos estancados", advirtió durante el foro Amcham Agribusiness.

El punto de comparación más cercano es la campaña 2018/19, cuando se alcanzaron 140 millones de toneladas. El avance en casi una década fue de apenas un 3%, lo que muestra que la producción argentina depende más de los precios internacionales que de nuevas inversiones.

Si bien la campaña proyecta máximos históricos en maíz y girasol, los productores enfrentarán márgenes acotados y precios internacionales en baja. La explicación está en que el crecimiento de la producción mundial es sostenido, récord tras récord, lo que presiona a la baja los precios y erosiona la rentabilidad local.

"Estamos perdiendo participación mundial. El ‘market share' argentino cayó del 20% al 12% en los últimos años, mientras que Brasil gana terreno y se consolida como líder regional", remarcó Costa.

El economista fue claro: "En el Mercosur, la postal se vuelve incómoda". Mientras el vecino brasileño amplía su capacidad exportadora año tras año, la Argentina celebra récords que, en realidad, son magros avances en un escenario de estancamiento.

Costa aseguró que la Argentina podría transformar el actual techo en un piso y empezar a proyectar 200 millones de toneladas si logra salir del modo defensivo. La receta incluye:

Equilibrio macroeconómico

Crédito accesible y de largo plazo

Inversión en infraestructura

Reforma tributaria y reglas claras

"Las restricciones son meramente políticas. La tecnología, el conocimiento y el área están dadas, pero el pie sobre la producción condena al sector a festejar récords chicos", explicó.

En la misma línea, Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina, coincidió: "La producción está encorsetada por decisiones de gobierno. No es que seamos malos productores".

El diagnóstico es compartido por analistas y productores: la Argentina tiene un motor agroindustrial con potencial de sobra, pero lo mantiene en ralentí. Mientras tanto, el mundo acelera y nos pasa por la banquina.

Como sintetizó Costa: "Si hay una actividad por excelencia en el país, es el agro argentino. La pregunta es si queremos una agricultura resiliente o una en expansión real".

Agrolatam.com
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