Clima en Argentina: septiembre trae alivio para la región Pampeana según el modelo europeo
Tras un agosto histórico por lluvias excesivas, septiembre se perfila con un escenario más equilibrado en la distribución de precipitaciones y temperaturas. El modelo ECMWF anticipa un mes con contrastes regionales, pero con señales positivas para el agro en la zona Pampeana.
El mes de agosto dejó registros inéditos de precipitaciones en el centro del país, con Córdoba, Santa Fe y el norte de Buenos Aires seriamente afectados por los excesos hídricos. Ahora, con septiembre en marcha, los modelos internacionales ofrecen un respiro para el sector agropecuario.
Según la última actualización del Centro Europeo de Pronóstico (ECMWF), se proyecta un patrón heterogéneo de lluvias y un esquema térmico que evitaría golpes de calor tempranos.
El noreste argentino (Corrientes, Chaco, Formosa y el extremo noreste de Santa Fe) podría recibir lluvias superiores a lo habitual.
En contraste, Córdoba, centro y sur de Santa Fe, noroeste de Buenos Aires, San Luis y La Pampa registrarían acumulados por debajo de lo normal, aunque sin extremos.
La señal más negativa aparece en el oeste de La Pampa, Mendoza, San Juan y el norte patagónico, con déficits más acentuados.
En el este bonaerense, la tendencia apunta a lluvias algo superiores al promedio, lo que podría complicar más a la cuenca del Salado, ya saturada por los excesos de agosto.
El comportamiento térmico mantiene la lógica de los últimos meses:
El sur argentino tendría temperaturas por encima de lo normal.
La zona central se mantendría en valores dentro del promedio estacional.
El norte presentaría registros levemente inferiores a la media, aunque sin riesgo de enfriamientos significativos.
Este esquema reduce la probabilidad de olas de calor tempranas, aportando estabilidad para la campaña agrícola.
El pronóstico para septiembre ofrece un escenario más moderado que el de agosto, clave para que los suelos puedan recuperarse y los productores avancen con la siembra y el manejo de lotes. Si bien persisten riesgos en zonas puntuales, la señal general del modelo ECMWF es alentadora para la región Pampeana, motor del agro argentino.