Día Mundial de la Agricultura: un sector en transformación frente al cambio climático, la digitalización y el relevo generacional
El 9 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la Agricultura, ocasión para reconocer el papel de quienes producen alimentos y para reflexionar sobre los retos actuales del sector, desde la sostenibilidad y la innovación tecnológica hasta la incorporación de mujeres y jóvenes en el campo.
El Día Mundial de la Agricultura, que se celebra este 9 de septiembre, rinde homenaje a la labor de los agricultores en todo el mundo y subraya la trascendencia de una actividad que no solo garantiza el acceso a alimentos de calidad, sino que también constituye un pilar económico y social. Sin embargo, la conmemoración llega en un contexto de profunda transformación del sector agrario, marcado por el cambio climático, los altos costos de producción, la digitalización, las nuevas demandas de los consumidores y el desafío del relevo generacional.
En España, la agricultura ocupa más de 23 millones de hectáreas de superficie agraria y registró en 2023 una producción valorada en 65.513 millones de euros, según datos del INE y del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). El sector da empleo a 770.000 personas, pero enfrenta una tendencia a la baja en el número de explotaciones, compensada con el aumento del tamaño medio de cada una.
Uno de los problemas más señalados por los productores es la competencia desleal frente a productos importados de países con normativas menos estrictas en materia laboral, ambiental o sanitaria. Esta situación se agrava con los altos costes de insumos y materias primas, que generan malestar entre los agricultores y presionan los márgenes de rentabilidad.
El cambio climático añade otra capa de complejidad. Sequías prolongadas, lluvias intensas y fenómenos extremos obligan a los agricultores a adaptarse con variedades más resistentes, sistemas de riego eficientes y prácticas sostenibles. La agricultura de conservación y la producción ecológica se consolidan como alternativas que buscan reducir la huella ambiental y garantizar alimentos con mayor valor agregado.
La digitalización es otro de los grandes retos. El acceso a herramientas de agricultura de precisión, big data, sensores de riego, monitoreo remoto e inteligencia artificial ya permite optimizar recursos y mejorar la eficiencia en explotaciones medianas y grandes. El uso de drones para aplicar fitosanitarios o vigilar cultivos es cada vez más común, al igual que la automatización de maquinaria agrícola. Sin embargo, muchos pequeños agricultores carecen de recursos financieros y capacitación técnica, lo que genera brechas de acceso. El asesoramiento tecnológico y la transferencia de conocimiento se vuelven indispensables para que la innovación llegue a todos.
Las cooperativas agroalimentarias juegan un papel central en este escenario. Su facturación creció 93% en dos décadas y en 2023 superó los 43.000 millones de euros, con exportaciones que en la última década aumentaron más de 100%. En 2025, declarado por la ONU como el Año Internacional de las Cooperativas, se busca resaltar su rol en el desarrollo económico, social y ambiental sostenible. Además, lideran la producción de alimentos ecológicos, representando ya el 39% del sector ‘eco' en España.
La participación de la mujer en el sector también ha crecido. Hoy, el 28,3% de la base social de las cooperativas está compuesta por mujeres, el 10% de los consejos rectores incluye representación femenina y un 14,3% ocupa puestos de dirección. El Ministerio de Agricultura distinguió en 2025 a las mujeres cooperativistas con el Premio a la Excelencia en Innovación para Mujeres Rurales, reconociendo su aporte en la autonomía, la toma de decisiones y el liderazgo en el agro.
El relevo generacional es otro desafío crucial. Apenas un 8,8% de los titulares de explotaciones en Castilla y León tiene menos de 41 años, cifra similar a la media nacional. En las cooperativas, los jóvenes representan un 9,8% de la base social y un 7,9% en los consejos rectores, aunque solo un 4,1% ocupa presidencias. Estos números reflejan la necesidad de incentivar a las nuevas generaciones para que encuentren atractivo incorporarse al campo, con apoyo financiero, acceso a tierras y programas de formación.
En el Día Mundial de la Agricultura, los números confirman tanto el peso de la actividad como la magnitud de los desafíos. El sector está llamado a transformarse con más sostenibilidad, más innovación, más inclusión y más juventud, para responder a una sociedad que exige alimentos seguros, trazables y respetuosos con el medio ambiente.