Ganadería argentina: un llamado a la unidad para salir del estancamiento
En la Exposición Rural 2025, referentes del sector plantearon desafíos urgentes y oportunidades concretas. Producción, mercados, sanidad y trazabilidad, los ejes de una jornada clave para pensar el futuro de la carne.
La ganadería argentina atraviesa un momento bisagra. Así lo expresaron los protagonistas de la jornada "La ganadería: de la tradición al futuro", organizada por la Comisión de Carnes de la Sociedad Rural Argentina (SRA) en el marco de la Exposición Rural 2025. Con discursos que combinaron autocrítica, datos duros y mirada estratégica, los referentes del sector coincidieron en un punto clave: la necesidad de unirse para salir del estancamiento.
Nicolás Pino, presidente de la SRA, abrió la jornada con un mensaje directo:
"Hay que volver a dar valor a la ganadería nacional. Si seguimos mirando solo la tradición, seguimos clavados en 50 millones de cabezas y 3 millones de toneladas".
Apostando a un cambio de mentalidad, Pino pidió dar "un paso adelante" para producir más y mejor, con responsabilidad y visión de largo plazo. Reconoció que el sector viene "con una pata en la cabeza desde hace más de 30 años", pero también mostró optimismo:
"El mundo demanda la carne que producimos. Hoy tenemos la oportunidad de cambiar nuestros números tradicionales".
El futuro global también demanda adaptación local
El consultor internacional Osler Desouzart dejó una advertencia clara: los mercados más exigentes buscan calidad, trazabilidad y atributos diferenciados. "Hay que leer a los consumidores globales si queremos ocupar esos nichos premium", remarcó.
En esa línea, el bloque sobre tipificación y calidad de carnes trajo ejemplos concretos desde Uruguay y EE.UU., con aportes de Sebastián Victorica (UBI Meat), Justin Gleghorn (Cactus Feeders Inc) y Silvio Marchetti, del Ministerio de Economía argentino. Todos coincidieron en que sin datos objetivos sobre el producto, el negocio pierde valor.
Sanidad, trazabilidad y confianza
El debate sobre fiebre aftosa fue otro de los focos calientes. Sergio Duffy y Santiago Tapia propusieron dejar atrás el modelo de vacunación tradicional, con prevención y detección precoz como claves para habilitar nuevas oportunidades comerciales.
Carlos Odriozola, en nombre de la Comisión de Carnes, destacó que la trazabilidad individual obligatoria comenzará en enero de 2026.
"Eso nos permitirá saber qué pasó con cada novillo, cómo era y cuánto vale. Desde el campo hasta el frigorífico, vamos a poder tomar decisiones con información real".
Una cadena que necesita integrarse
La jornada cerró con un mensaje contundente:
"No podemos seguir fragmentados. Esta es una cadena donde todos -productores, industria y Estado- debemos trabajar juntos".
Así lo expresó Odriozola, reforzando una idea que atravesó todo el encuentro: sin unidad ni reglas claras, no hay futuro sostenible para la carne argentina.