Brasil mantiene su liderazgo mundial en el segmento cárnico, clave para el agronegocio, la rastreabilidad y los estándares sanitarios exigidos por mercados internacionales. En 2025, la producción de carnes bovina, suína y de aves alcanzará los 31,57 millones de toneladas, confirmando una tendencia de estabilidad (la cifra de 2024 fue prácticamente idéntica) gov.br+7gov.br+7gov.br+7.

Este nivel es muestra de la resiliencia del campo brasileño -impactado por las mudanças climáticas, oscilaciones cambiarias y costos de insumos- pero también evidencias de la eficacia de medidas de tecnificación, boas práticas agrícolas (BPA) y políticas de crédito rural.

Panorama actual y datos clave

Volumen de producción: bovina, suína y avícola suman 31,57millones de toneladas en 2025, cerca del récord de 2024 .

Tendencias externas: alta demanda internacional promueve presión exportadora, especialmente de carne de pollo y cerdo.

Mercado doméstico: fiel a la estrategia de segurança alimentar, la población brasileña también contribuye al nivel de consumo interno y del mercado de frigoríficos.

Factores determinantes y su impacto

Clima y costos

Las condiciones meteorológicas irregulares, con lluvias tardías en el sur, han influido levemente en la productividad de pasturas y engorde de ganado. - Aún así, los productores, fortalecidos por el crédito rural y la capacidad de manejo de riesgo mediante la ILPF, lograron mantener la oferta.

Insumos y tipo de cambio

El aumento del dólar fortalece los precios de exportación, aunque también encarece los insumos importados (vacunas, fertilizantes), afectando la rentabilidad. La gestión de crédito rural y seguros agropecuarios compensan en parte esta presión.

Innovación, tecnología y BPA

La adopción de tecnologías de precisión, manejo sanitario a través del MAPA/Embrapa, así como la rastreabilidad, han sido esenciales.

Sistemas de monitoreo en tiempo real permiten optimizar la alimentación y salud del rebaño bovino y porcino.

Iniciativas de carne carbono neutro y cadenas sostenibles agregan valor, mejoran la imagen exportadora y aseguran acceso a mercados con estándares ESG.

Desafíos y oportunidades

Logística e infraestructura

Aunque hay avances en ferrovias e hidrovias, la dependencia del transporte por carretera encarece los costos y aumenta la incidencia de pérdidas en la logística.

Sustentabilidad y BPA

La transición hacia modelos con menor impacto ambiental se acelera, pero demanda inversión en prácticas como manejo de dejetos, uso racional de agrotóxicos y control de emisiones de metano.

Política pública y financiamiento

El novo Plano Safra apunta a líneas adicionales de crédito para sustentabilidade y logística, mientras MAPA y Conab refuerzan monitoreo y asistencia técnica para productores, cooperativas y frigoríficos.

Reflexión de actores

Según técnicos de Embrapa y líderes de federaciones de criadores:

"El soporte tecnológico y crediticio ha sido vital para sostener este nivel de producción"
"Faltan aún más inversiones en cadena fría y transporte ferroviario para mejorar competitividad".

La producción de carnes brasileñas en 2025 no solo consolida un platô histórico, sino que refuerza la relevancia del agronegocio para la seguridad alimentaria, la rentabilidad y la imagen global de eficiencia.
El desafío ahora es mejorar la infraestructura, profundizar las buenas prácticas agrícolas, y potenciar la sustentabilidad sin sacrificar escala ni acceso a los mercados. El futuro dependerá de cómo Brasil articula políticas integradas de innovación, logística y financiamiento para fortalecer su cadena de valor.