Venezuela asegura que todo el consumo de carne bovina en 2025 proviene de producción nacional
El gobierno informó que este año se sacrificaron 1,5 millones de animales, garantizando el abastecimiento interno sin recurrir a importaciones. El despliegue ganadero en Apure reflejó el potencial del sector.
El gobierno de Venezuela anunció que la totalidad del consumo de carne bovina en el país durante 2025 proviene de la producción nacional, sin recurrir a importaciones. Así lo informó el ministro de Agricultura Productiva y Tierras, Julio León, quien precisó que hasta la fecha se han sacrificado 1.500.000 animales en el marco del plan nacional de abastecimiento.
El funcionario subrayó que este logro es posible gracias al fortalecimiento de la empresa ganadera estatal, que actualmente gestiona 20 hatos distribuidos en diferentes regiones del país. Según León, esta capacidad organizativa permite sostener el suministro interno y garantizar la llamada soberanía alimentaria, un concepto clave en la política agropecuaria venezolana.
"Toda la carne que se está consumiendo hoy en día es 100% venezolana. Esa es una muestra concreta de soberanía alimentaria", afirmó el ministro, al destacar que la meta se cumple a pesar de las restricciones económicas que enfrenta el país y de la alta demanda de proteína animal en los hogares venezolanos.
Como parte de la exposición de resultados, el gobierno presentó lo que describió como el arreo ganadero más grande realizado en Venezuela en los últimos años: más de 6.000 mautes fueron movilizados desde el Hato Cañafístula hasta el Hato Taragua, en el estado Apure. La jornada contó con la participación de 100 jinetes y buscó mostrar la capacidad organizativa y logística de la producción nacional.
El evento fue coordinado por distintas instancias estatales y regionales, con la participación de hatos públicos y privados bajo gestión del Estado. La actividad en Apure fue presentada como un símbolo del potencial agropecuario venezolano, en un estado que históricamente ha sido epicentro de la producción bovina y que cuenta con vastas extensiones de sabana aptas para la cría y engorde de ganado.
Las autoridades destacaron que este resultado refuerza los esfuerzos por alcanzar la autosuficiencia alimentaria en un rubro estratégico como la carne bovina, al tiempo que se mantiene el reto de sostener la producción frente a las dificultades que imponen la variabilidad climática, el acceso a insumos y las necesidades de financiamiento para pequeños y medianos productores.
El anuncio también busca responder a la percepción ciudadana sobre la disponibilidad de carne en el mercado interno. En los últimos años, el consumo de proteína animal se había visto afectado por la caída de la producción y las dificultades económicas de las familias. Sin embargo, el gobierno asegura que, al menos en 2025, el abastecimiento está garantizado con producción propia.
Más allá de la cifra de 1,5 millones de animales sacrificados, el reto para los próximos meses será sostener la disponibilidad de ganado en pie, garantizar la distribución en todas las regiones del país y mantener los precios accesibles para los consumidores. El hecho de que no se hayan registrado importaciones en este ciclo refuerza la apuesta oficial por un modelo de autoproducción nacional, aunque especialistas advierten que será necesario seguir invirtiendo en genética, alimentación animal y tecnificación de hatos para evitar caídas en los próximos años.
La movilización de más de 6.000 animales en Apure también fue presentada como un acto de reafirmación cultural y productiva. El arreo, que combinó tradición y logística moderna, buscó poner en valor la capacidad de la llanura venezolana para sostener la producción ganadera y proyectar al país como un productor con posibilidades de crecimiento regional.
El gobierno asegura que el modelo de producción nacional de carne bovina está consolidándose y que representa un paso hacia la independencia agroalimentaria. No obstante, la sostenibilidad de esta estrategia dependerá de la capacidad para enfrentar las variaciones climáticas, asegurar pasturas de calidad, y sostener el financiamiento y asistencia técnica a los productores rurales.
Con este anuncio, Venezuela reafirma que la carne que consumen sus ciudadanos en 2025 es 100% nacional, un mensaje que combina cifras productivas con un componente político de soberanía y resiliencia frente a los desafíos internos y externos.