La firma española Alaisa, que adquirió la planta de fabricación de quesos que Sancor tiene en Brinkman, en el departamento San Justo, a 270 kilómetros de la capital provincial, y que no opera desde hace un año, estudia nuevas inversiones en la Argentina.
La empresa -sobre la que en su momento corrió la versión de que podría comprar toda la cooperativa de Sunchales- se hizo cargo del personal que no decida optar por el retiro voluntario.
SanCor aceptó la oferta que Alaisa le hizo a fines de enero, pero no trascendieron los números de la venta aunque rondaron los 75 millones de pesos.
El grupo español, que ya compró campos en esta provincia y en Corrientes, habría dejado trascender a distintos interlocutores proyectos de inversión en el país por hasta 8000 millones de dólares.
Brinkmann tiene un depósito importante de quesos y acondicionamiento de materia prima para seleccionarla por calidad.
Fuentes de SanCor confirmaron que el acuerdo es sólo por Brinkmann y que no hay tratativas por otras plantas. Hace un mes, la fábrica de Coronel Moldes volvió a funcionar con la operación de una cooperativa de productores.
La española tiene socios en este país (su apoderado es Carlos Docchio), donde opera principalmente como distribuidor de productos alimenticios. Sus bases operativas están en España, México y Shanghai. Provee a distintos mercados derivados de pollo, cortes de cerdo, quesos y jamón ahumado.
En la planta de Brinkman también estuvo interesado el grupo inversor Euro Finance, que finalmente se decidió por una inversión láctea en el parque industrial de esa ciudad.
El intendente Gustavo Tevez indicó que el acuerdo trae "tranquilidad" al lugar y apuntó que el acuerdo incluye hacerse cargo de los 30 empleados de la planta. "Lo importante es que el emprendimiento pueda generar nuevos puestos de trabajo en el futuro".