Aunque febrero trajo lluvias a gran parte del país, algunas regiones no recibieron suficiente agua, complicando la campaña gruesa, especialmente en el noreste argentino.
La Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) informó que los lotes de soja de primera en Santiago del Estero, Chaco y Formosa siguen en sequía, una situación que también afecta al este de La Pampa y al centro-sur de Buenos Aires.
Tormentas en camino: ¿un alivio para el noreste?
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta por tormentas para Formosa, Chaco, Jujuy, Santiago del Estero, Tucumán y Catamarca, lo que podría traer alivio en los próximos días.
Mientras tanto, el panorama en otras zonas muestra mejoras significativas. Entre Ríos fue una de las provincias más beneficiadas, con lluvias casi diarias la semana pasada. Según ORA, esto permitió que las reservas de humedad pasaran de déficit a niveles regulares o incluso adecuados.
Recuperación en la zona núcleo
La región núcleo también tuvo mejoras en los acumulados de agua, especialmente en el sur de Santa Fe y áreas limítrofes de Buenos Aires.
En Córdoba y el centro de Santa Fe, la sequía disminuyó, y ahora los suelos presentan reservas escasas o regulares.En la primera quincena de febrero, cayeron 50 milímetros en la zona núcleo.Algunas áreas del sudeste de Córdoba, el sur de Santa Fe, el sur de Entre Ríos y el norte de Buenos Aires superaron los 100 milímetros acumulados en el mes.Este sector representa 3 millones de hectáreas de soja, que a finales de enero estaban en condiciones de humedad deficitarias.
Preocupación en la Patagonia por incendios
En contraste con el alivio en la zona núcleo, Neuquén, Chubut y gran parte de Río Negro no recibieron más de 10 milímetros de lluvia en lo que va del mes. Esto mantiene alta la peligrosidad de incendios en estas regiones.
"Las lluvias ayudarán en varias zonas productivas, pero el noreste sigue necesitando acumulados importantes para revertir la situación crítica", concluyó ORA.