Se espera que el presidente Biden pida al Congreso que suspenda los impuestos federales a la gasolina y el diésel durante los próximos tres meses, el último esfuerzo de la Casa Blanca para brindar alivio a los estadounidenses que luchan con los precios récord de la gasolina y el diésel. La medida depende de la acción legislativa, que eliminaría temporalmente el impuesto de 18,3 centavos por galón de gasolina y el impuesto de 24 centavos por galón de diésel durante los meses de verano.
El plazo de tres meses fue específicamente para abordar la creciente demanda de gasolina durante los meses de verano cuando aumentan los viajes. Sin embargo, a más largo plazo, un funcionario de la administración de Biden reconoció que los ingresos del impuesto son una fuente vital de financiación de infraestructura.
Biden expondrá la propuesta en un discurso de la Casa Blanca esta tarde , cuando también pedirá a los estados que suspendan sus impuestos a la gasolina o proporcionen reembolsos u otras formas de alivio, dijo el funcionario. Además, se espera que Biden haga un llamado a las empresas de refinería de petróleo para que tomen medidas para impulsar la producción.
Biden también le pedirá al Congreso que reponga el Fondo Fiduciario de Autopistas, que está respaldado por los impuestos a la gasolina, con otros ingresos para que esté "completo" en medio de una suspensión del impuesto a la gasolina. La Casa Blanca estima que se necesitarían alrededor de $ 10 mil millones para hacerlo. Esa puede ser una forma de obtener algunos votos demócratas adicionales para la suspensión del impuesto a la gasolina y el diésel.
La secretaria de Energía, Jennifer Granholm, se reunirá por separado con ejecutivos petroleros el jueves para discutir formas de reducir los precios de la gasolina y el diésel, luego de que Biden envió una carta a siete compañías importantes exigiendo que tomen medidas para ayudar a reducir los costos para los consumidores. Ejecutivos de Exxon Mobil, Shell, Valero, Marathon, Phillips 66, BP y Chevron están programados para asistir a la reunión, dijo la Casa Blanca.
Impacto: cuando algunos estados optaron por suspender sus propios impuestos sobre el combustible en el pasado, a veces los precios volvieron a ser más altos, según un estudio publicado la semana pasada por la Escuela Wharton de la Universidad de Pensilvania.
Los conductores estadounidenses están comenzando a comprar menos gasolina a medida que sienten la carga económica de los precios récord que continúan rondando los $5 por galón. En la primera semana completa de junio, las ventas de gasolina en las estaciones de EE. UU. cayeron alrededor de un 8,2 % en comparación con la misma semana del año pasado, la decimocuarta semana consecutiva en que las ventas han quedado rezagadas con respecto a los niveles de 2021, según encuestas del proveedor de datos de energía OPIS. En la semana que finalizó el 10 de junio, la medida de demanda implícita de la Administración de Información de Energía, una estimación de los productos suministrados a los consumidores, disminuyó aproximadamente 110.000 barriles por día con respecto a la semana anterior, a alrededor de 9,1 millones de barriles por día. Esa cifra es inferior a los 9,4 millones de barriles por día del mismo período del año pasado.
El WSJ informa ( enlace ) que los conductores han comenzado a consolidar viajes o llenar sus tanques con solo la cantidad de combustible que necesitan para pasar unos días. Algunos comparten el automóvil o toman el transporte público, mientras que otros trabajan desde la oficina durante menos días cada semana.
