Aumenta las temperaturas y hace que las lluvias sean más erráticas en el medio oeste y las llanuras, según un nuevo informe publicado el martes. Encargado por American Farmland Trust, el informe dice que el proyecto de ley agrícola de 2023 debería abarcar la mitigación climática y proporcionar el dinero para ayudar a los agricultores a adaptarse al calentamiento global.
"Si bien todos los sectores tienen un papel que desempeñar en la solución de la crisis climática, la agricultura es un sector que puede desempeñar un doble papel al reducir sus propias emisiones (de gases de efecto invernadero) y al extraer el dióxido de carbono existente de la atmósfera para frenar el cambio climático". dijo el informe, Impactos Climáticos Proyectados en las Condiciones de Crecimiento para la Agricultura de Secano en los Estados Unidos Contiguos.
Si las emisiones de gases de efecto invernadero continúan aumentando rápidamente, el 31 por ciento de las tierras de maíz y el 30 por ciento de las de trigo enfrentarán cambios adversos en las condiciones de crecimiento para 2040, según el informe. "En una trayectoria de altas emisiones, es probable que solo el 33 por ciento de los acres de maíz en 2040 sigan siendo altamente productivos con las prácticas de gestión actuales".
Más del 80 por ciento de las tierras de cultivo en los 48 estados contiguos depende de las lluvias oportunas para producir cultivos. "Con el aumento de las temperaturas y los cambios en los patrones de lluvia, los cultivos y las empresas respaldadas por estos cultivos de secano corren un riesgo cada vez mayor", dijo el informe. "Es probable que la producción de cultivos en el futuro enfrente fenómenos meteorológicos extremos más frecuentes, como vientos destructivos, granizo, daños por heladas, sequías, olas de calor prolongadas y aguaceros torrenciales, así como mayores daños debido a plagas y enfermedades de los cultivos".
El informe coincidió con una advertencia del Fondo de Defensa Ambiental en octubre pasado de que "el cambio climático amenaza con desacelerar o revertir" las ganancias constantes en la productividad disfrutadas durante décadas por los productores de maíz, soja y trigo. "En muchos de los condados agrícolas más productivos de los Estados Unidos, las temperaturas más altas y los cambios en las precipitaciones reducirán los rendimientos de los cultivos básicos por debajo de lo que pueden recuperar las innovaciones tecnológicas y las mejoras en las prácticas de gestión", dijo el EDF.
En el nuevo informe, la AFT instó al Congreso a revisar las porciones de administración de la tierra y seguro de cultivos del proyecto de ley agrícola para mejorar la resiliencia y reducir el riesgo de daños climáticos en la granja y crear un fondo federal de contrapartida para impulsar programas estatales innovadores de salud del suelo.
"Prácticas como la siembra de cultivos de cobertura, la adopción de labranza cero o reducida y la diversificación de la rotación de cultivos pueden mejorar las funciones físicas y biológicas del suelo y su capacidad para secuestrar carbono", dice un resumen del informe. "Las tierras de cultivo gestionadas para la salud del suelo son más resistentes a un clima cambiante; son menos vulnerables a la erosión, tienen una mayor capacidad de retención de agua durante la sequía, apoyan la estabilidad del rendimiento de los cultivos y, en muchos casos, secuestran carbono"
