impulsados por una fuerte demanda y expectativas de menores existencias finales según el próximo informe WASDE (Estimaciones Mundiales de Oferta y Demanda Agrícola) que se publicará el martes.
Según Bryan Doherty, analista de Total Farm Marketing, los contratos de maíz para marzo superaron la barrera clave de 4,35 dólares por bushel, logrando su cierre semanal más alto en meses. Este desempeño refleja una demanda sólida y proyecciones de inventarios más ajustados, lo que genera optimismo en el mercado.
"El maíz muestra un crecimiento técnico que podría consolidarse con las cifras del WASDE", señaló Doherty.
Por su parte, la soja en los contratos de enero también cerró la semana en alza, a pesar de las preocupaciones por los posibles aranceles y la inminente gran cosecha sudamericana, que podría influir en los precios globales.
Trigo: recuperación en las tres variedades
El trigo rojo blando de invierno logró un doble piso técnico esta semana, impulsando al alza los precios de las tres principales variedades de trigo. Este repunte da señales de estabilidad tras semanas de debilidad en el mercado.
En el sector ganadero, los futuros de ganado de engorde cerraron al alza, mientras que el ganado vivo tuvo resultados mixtos a pesar de un repunte en el comercio en efectivo, con precios que oscilaron entre 190 y 192 dólares por cabeza.
Doherty advirtió que la falta de recuperación en el ganado vivo, incluso con las buenas noticias del mercado en efectivo, podría ser una señal de desaceleración de la demanda hacia finales de año.
Leche: recuperación esperanzadora
El mercado de la leche también registró una reversión semanal al alza, lo que podría indicar que los precios mínimos ya se han alcanzado.
"El mercado de la leche muestra señales de estabilización, lo que es positivo para los productores en un contexto de alta volatilidad", concluyó Doherty.
Expectativas con el WASDE
Con el informe WASDE programado para el próximo martes, los analistas esperan más claridad sobre las proyecciones de producción, consumo y exportaciones en los principales mercados agrícolas. Tanto el maíz como la soja podrían ver ajustes en las expectativas de inventarios, lo que definiría la tendencia para las semanas restantes del año.
El sector agrícola sigue mirando con atención cómo evolucionarán los mercados en un escenario marcado por desafíos globales como el clima, las tensiones comerciales y las demandas de biocombustibles.