El sector ganadero de Argentina ha experimentado un incremento moderado en los precios durante los primeros cinco meses de 2024, pero sigue enfrentándose a un estancamiento en comparación con el índice de inflación, según un reciente informe del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria de Bahia Blanca (INTA). A pesar de que el valor del novillo ha aumentado un 43% y el del ternero un 26%, estos incrementos quedan por debajo del índice de inflación del 65%, mostrando una recuperación más lenta para el sector.
Actualmente, se requieren 2,41 terneros para adquirir un novillo, lo que representa una disminución del 9,3% respecto a mayo de 2023, cuando se necesitaban 2,65 terneros. Esta relación de precios entre novillos y terneros refleja la distorsión en el mercado y la presión sobre los productores para ajustar sus estrategias de producción y venta.
El análisis de las relaciones de precio entre otras categorías ganaderas revela dinámicas interesantes: actualmente se necesitan 1,23 terneras de 160 kg para adquirir un ternero de 170 kg, marcando el valor más alto de la década. Por otro lado, la relación vientre/novillo está en su punto más bajo desde 2015, con 0,73 novillos necesarios para comprar una vaquillona con garantía de preñez.
Los precios actuales de novillo y ternero están cerca del valor promedio observado en el periodo 2015-2023, lo que indica que, a pesar de los incrementos, el mercado aún no ha logrado superar las marcas altas de 2021 y 2022. Este estancamiento es visible en todas las categorías de hacienda, afectando la rentabilidad y la planificación a largo plazo de los productores.
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