Opinión

Industria agroganadera: la importancia de integrarse verticalmente

Una estrategia para ser rentable y sustentable en el tiempo.

9 Sep 2021

 La industria agroganadera en Argentina viene mostrando parámetros de crecimientos sustentables en el tiempo. Es relevante mencionar el desenvolvimiento del campo  argentino, con ello, la generación de empleo, el agregado de valor, de producir alimentos para colocarlos en el mercado internacional, generar ingreso de divisas y aportar en materia tributaria.

El campo siempre ha sido un sector que genera riqueza, las cifras reportadas en los últimos años a nivel producción de toneladas de carne  y cereales ponen de manifiesto que Argentina fue, será y seguirá siendo un país rico en materia de producción de alimento para el abastecimiento de mercado interno y mercado externo. Un gran porcentaje del PBI argentino viene por la producción del campo, y a su vez la mayoría de las divisas que genera el país vienen por la exportación de carne y cereales. Todo esto a su vez contribuye a la creación de empleo genuino. Estos indicadores cuantifican la contribución económica y social del campo al desarrollo del país.

Ahora el tema pasa por cómo ser exitoso en la gestión de un campo. Primero, hay que saberlo administrar. Implica estar en el negocio, seguirlo de cerca y mantener la producción constante. Seguir de cerca los parámetros sanitarios, apoyarse en la tecnología para medir la ganancia en kilos de carne que se produce y saber administrar el mix de alimentación óptimo entre carne y cereales para maximizar rentabilidades y ser eficiente en los costos de producción. La clave pasa por la dedicación que uno le ponga, lo que invierta en mantenimiento y equipamiento de instalaciones, supervisando al personal que trabaja, anticipándose a cuestiones más relacionadas con el clima para tomar decisiones anticipadas y acertadas. Asimismo, es muy importante saber rodearse de buena gente. Gente que entienda el negocio, que sepa lo que hace y que trabaje en equipo.

Por otro lado, en el contexto macroeconómico que vivimos hoy, a veces no alcanza con gestionar eficientemente un campo y hacerlo producir. Hay factores imponderables relacionados con la política económica que imponen los gobiernos de turno. Hoy nos toca vivir un escenario de restricciones, de alta inflación, de incertidumbre política y cambiaria, que hacen que a veces lo que uno genera internamente se vea impactado por las decisiones del gobierno.

El campo en los últimos dos años ha sido un sector bastante golpeado por el gobierno nacional, sin embargo, es el único sector de la economía argentina que crece año tras año y sostiene la máquina productiva del país, subsidiando a otras industrias también importantes como ser la automotriz y la de la construcción. La clave pasa por saber implementar la estrategia correcta y estar preparado para lo que pueda pasar, tener planes alternativos.

Por último, y un tema no menor, tiene que ver con que desde hace un año y medio vivimos en pandemia. A contramano del país, la producción de alimento en el campo se potenció mucho desde que comenzó la pandemia. La gente consume más alimento internamente y China demanda cada vez más. Pocas industrias sobrevivieron a la pandemia en este país, una de ellas es la agroganadera. Ahora bien, para superar la pandemia e impulsar el crecimiento económico que este país tanto necesita, el primer sector al que se debería apoyar es al campo para generar crecimiento genuino. Tenemos un país muy rico en actividades primarias como ser agricultura y ganadería, solo necesitamos una política económica racional y de sentido común, dejando de lado las cuestiones ideológicas.

Ahora bien, ¿cómo ser exitoso en la producción agroganadera, sabiendo redireccionar la estrategia en función de la cambiante política económica y en medio de una pandemia? La respuesta es una sola: Integración Vertical. ¿Qué significa? Crear y relacionar todos los eslabones de la cadena de valor del negocio alimenticio para poder administrar esfuerzos y crear unidades de negocios rentables pero interconectadas entre sí.

En la teoría parece una brillante idea, pero no todos saben llevar esa idea a la acción. Para eso necesitás un equipo de trabajo exitoso, con perfiles diferentes, que funcione a la perfección. Y empezar a crecer desde abajo, haciendo bien las cosas, con humildad y sacrificio, los resultados no tardan en llegar.

Grupo Surmax es una empresa argentina que lo hizo posible. Marcelo Manes y Omar De Lucca, crearon Agropecuaria Surmax (Unidad Productiva) en 2018. Marcelo, con experiencia en el manejo de campos, mataderos y frigoríficos, habiendo permanecido en el negocio cárnico durante más de 20 años. Y por el otro lado Omar, con perfil financiero y comercial, con experiencia en la industria financiera de 15 años, que gestiona las áreas de finanzas, inversiones, tesorería, marketing, publicidad y contabilidad en el grupo económico. Luego, crearon Argus Meats (Unidad Comercial) en 2019. Abrieron sus propias carnicerías boutique, lanzaron su propio ecommerce de carne envasada al vacío y comenzaron a exportar desde hace casi un año. En apenas 3 años, se integraron de punta a punta. Crearon una estructura formando equipos de trabajo exitosos en diferentes áreas.

Desde la cría y recría de ganado, produciendo su propio alimento, procesando el producto terminado para agregarle valor a la cadena y comercializándolo de manera directa para mercado interno y externo. ¿Cuál fue la clave? La eliminación de todo tipo de intermediarios en la cadena de valor y la integración de diferentes unidades de negocios en un mismo grupo económico. No es fácil hacerlo, pero ellos lo hicieron y van por más en su senda de crecimiento y expansión que ya alcanza los niveles internacionales.

¿Qué significa en la práctica esa integración vertical de la que mencionamos? Lo vamos a ejemplificar... Ellos invirtieron tiempo y dinero en crear una empresa agropecuaria, en arrendar hectáreas de campo (administran casi 2.600 hectáreas) para producir alimento. Pero no se quedaron solo con eso, lograron armarse de un plantel de 1.000 vientres (Vacas de Cría), unos 30 toros aproximadamente.

Con eso, generan pariciones de terneros todos los años (administran casi 3.000 terneros). Producen el cereal ellos mismos, maíz, soja, trigo, girasol, entre otros (destinan aproximadamente 1.100 hectáreas a la producción de cereales). Entre la producción y la comercialización, hay una etapa intermedia, que es el procesamiento del alimento para que el mismo llegue a la góndola listo para ser consumido (cortes de carne porcionados y envasados al vacío). Ellos también lo hacen. Por lo cual comercializan de manera directa el producto terminado con valor agregado en el proceso listo para ser consumido. Lo hacen acá a través de su red de carnicerías boutique, clientes mayoristas, tienda online. Y lo hacen en el exterior exportando gran parte de su producción a China y resto del mundo.

¿Cómo lo hicieron posible financieramente? A través de la creación de un fideicomiso productivo para captación de fondos de terceros para aplicarlos a la producción de alimento. El Fideicomiso Ganadero Surmax y el Fideicomiso Agrícola Surmax, son sus vehículos financieros principales para apalancarse en capitales de terceros y generar una rentabilidad por diferencial, entre venta, costo variable y costos financieros. Si bien el spread es chico en términos porcentuales, la ganancia se hace en el volumen de producción en el tiempo. Ellos buscan crecer en pasivos financieros, para crecer en activos productivos y activos fijos, que respalden la deuda tomada. El patrimonio neto es positivo y la empresa se hace rentable y sustentable en el tiempo.

Al principio de la nota mencionamos la importancia de integrarse verticalmente en la producción de carne y cereales para ser sustentable en el tiempo y contamos un caso de éxito en nuestro país. Cuando eso se logra, la clave pasa por reinventarse constantemente y seguir creciendo. No quedarse en los éxitos del pasado y pensar siempre a futuro, en cómo mejorar lo que se viene haciendo y en donde redireccionar esfuerzos para seguir creando nuevas unidades de negocios y fortaleciendo la expansión.

En esta industria, es importante pensar más allá de la producción local, y expandirse regionalmente. Transformarse desde una empresa nacional a una empresa multinacional. Un caso de éxito en este país es muy valorado en el contexto en el que vivimos hoy, entonces si se sabe replicar ese modelo de negocios en otro país, el éxito se expande y la empresa se hace más grande.

Por último, y reforzando el concepto de la integración vertical, siempre hay un eslabón por cubrir en el futuro. Un claro ejemplo son las exportaciones de carne. Si uno logra llegar a un país como China con el valor agregado del procesamiento y el porcionado del alimento, estará abarcando un eslabón más en la cadena y maximizando rentabilidades. Cuánto más integrada una empresa esté en esta industria, más rentabilidades va a obtener como resultado de la sumatoria de unidades de negocios y mejor preparada va a estar cuando alguna de sus unidades por cuestiones de política económica deja de producir rentabilidades pero que las pueda cubrir con otras unidades de negocio que si generan resultados.

Grupo Surmax continúa con sus planes de expansión en el corto y mediano plazo, con objetivos que trascienden lo local y van por el plano internacional. Tienen en mente lanzar en dos meses su propia plataforma de inversiones virtuales, expandir su producción a Uruguay, proyectos gastronómicos ambiciosos en localidades estratégicas del país, apertura de franquicias y crecimiento de exportaciones. La marca hoy está posicionada como empresa productiva comercial integrada, pero también como opción para los pequeños y medianos inversores de poder ser parte del negocio agroganadero invirtiendo en sus fideicomisos y obtener retornos interesantes en dólares.