Después del paráte impuesto por la pandemia, el regreso a las ferias presenciales renovó el entusiasmo de los fabricantes de maquinaria agrícola por presentar sus novedades y hacer nuevos negocios
Del 9 al 13 de noviembre, se llevó a cabo la EIMA - Exposición Internacional de Máquinas para la Agricultura y la Jardinería- en el predio de Exposiciones de Bologna, Italia. Junto con la Agritechnika de Hannover, Alemania, es la feria bianual de maquinaria agrícola más importante de Europa.
Esta edición superó el número de visitantes récord, albergando a 327.100 personas que recorrieron los 375.000 m² para conocer las novedades que presentaron 1.950 expositores provenientes de 50 países, con más de 50.000 modelos de equipos y herramientas para todo tipo de elaboración agrícola y hortícola.
"El éxito de EIMA confirma el creciente interés en las tecnologías agrícolas de nueva generación para satisfacer las necesidades alimentarias de una población mundial que crecerá en casi mil millones en los próximos diez años, y confirma cómo en cada región de el mundo se trabaja en innovar métodos de cultivo, buscando hacer un uso científico y sostenible de los recursos hídricos y la fertilidad de los suelos", declaró Alessandro Malavolti, presidente de FederUnacoma, entidad organizadora de la EIMA.
"EIMA es una de las principales ferias de Europa, y estar presentes es formar parte de la vidriera del mundo", indicó Carlos Braga, de Comercio Exterior de CAFMA, "no sólo es estratégica para realizar contactos, sino también para reforzar el posicionamiento de la maquinaria argentina en Europa".
En el Pabellón Argentino estuvieron las empresas de maquinaria y autopartes Buco, Cedar, Cestari, OMBU Maquinarias, Richiger y la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional (AAICI).
En representación de las entidades regionales, también asistieron las empresas Piersanti (por AFAMAC), Allochis (por Magriba) y Richiger (por ASIMA) invitados por la ICE -Agencia de Inversiones y Estímulo al Comercio de Italia- para reforzar los contactos con sus colegas, proveedores y clientes italianos. Todos pudieron dialogar con el Cónsul General en Milán, Luis Pablo Niscovolos sobre la importancia de participar en esta feria para acercar la última tecnología argentina para mejorar la producción agropecuaria en el suelo italiano.
Las experiencias en primera persona
"Hace más de 15 años que venimos a promocionar nuestro sistema de embolsado de silobolsa con nuestros equipos para grano entero seco y para grano húmedo, que estamos insertando en Rumania, Alemania y Lituania con buenos resultados. Hicimos muchos contactos y vemos muchas posibilidades de seguir vendiendo y mantener el liderazgo mundial", señaló Gabriel Richiger, quien también subrayó las dificultades de sostener las ventas en el mercado externo por la falta de competitividad: "nuestras máquinas son muy buenas, pero resultan caras.
Tenemos un tipo de cambio con inflación en dólares, entonces hoy el precio nos pega muy duro al momento de cerrar el negocio; lo que nos resulta complicado a veces. Nosotros exportamos el 30% de nuestra producción, y tenemos gimnasia entrenada para planificar y cubrir cada mercado según su necesidad. Pero esta circunstancia que estamos pasando no es buena. Somos líderes en el mundo y es importante continuar asistiendo e innovando, pero necesitamos poder poner el precio que corresponde".
"La feria fue muy buena y había muchos pabellones muy interesantes para recorrer. El stand de Argentina estaba muy bien ubicado e impecable. Nosotros fuimos con nuestras líneas de ruedas tapadoras para las sembradoras europeas. Proveemos a varios fabricantes europeos y nos adaptamos a sus medidas. Por otro lado, presentamos un nuevo tipo de rueda niveladora, bastante novedoso para este mercado", señaló Mariano Bucovic, de Buco.
La empresa Ombú participó con un Stand Institucional. "Fue una Feria muy interesante en la que pudimos contactar a clientes y concesionarios conocidos con los que operamos habitualmente y también tuvimos la oportunidad de generar reuniones con potenciales nuevos distribuidores, lo que nos interesa sobremanera. Por supuesto, también nos interesó observar cuáles son las tendencias a nivel tecnológico respecto a la maquinaria y sus componentes. Nos llevamos un balance realmente muy positivo", indicó Danilo Gribaudo.
Néstor Cestari, de la firma que lleva su nombre, expresó que "es el cuarto año que participamos. Siempre presentamos tolvas grandes, pero como no teníamos disponibilidad, vinimos con una más chica. Hicimos muchos contactos con gente de Europa central, de Europa del Este, y con posibilidades de comenzar a exportar a nuevos países. La idea es estar preparados para cuando llegue la época que uno necesite más la exportación que en este momento que tenemos buen trabajo en el mercado interno. Agradecemos a la gente de la Agencia de Inversiones y Comercio Exterior que siempre están dispuestos a apoyarnos",
Mariano Munafó de Allochis dijo que "fuimos a EIMA con el mismo objetivo que nos proponemos en cada evento de similar magnitud: capacitarnos y mantenernos informados acerca de nuevos lanzamientos y novedades tecnológicas en el rubro de la agricultura. Nos pusimos en contacto con proveedores y competidores que se ven relacionados con nuestros productos con el fin de proyectar y planificar futuras relaciones comerciales".
Por otra parte, señaló que "vemos una participación muy optimista de nuestros productos de fabricación nacional en cuanto a calidad, lo que está opacada por el voto de confianza negativo que recibimos cuando hablamos de estabilidad y fortaleza económica de nuestro país para con el mundo".
Desde la firma cordobesa Piersanti, Juan Galiano contó que: "decidimos ir porque es una de las ferias más importantes de Europa. Uno de nuestros objetivos era ir a buscar nuevos proveedores para nuestros productos, como componentes hidráulicos y barras cardánicas. También fuimos a ver las novedades, hacia dónde tiende la maquinaria agrícola en otras partes del mundo. Es otro tipo de maquinaria que se expone, porque hay menos superficie, otros tipos de cultivo, entonces hay equipos de todo tipo. Había mucha maquinaria para riego, un pabellón para jardinería y un sector digital con todas las novedades en automatización y robotización. El camino va hacia la conectividad de las máquinas que tiene el productor y la subida de información a un lugar donde se pueda acceder. Tuvimos la oportunidad de participar en las Rondas de Negocios donde hicimos contactos muy interesantes".
Finalmente, Juan Volonté, de la firma Cedar, declaró acerca de su primera participación en la EIMA: "fuimos con la expectativa de abrir nuevos mercados a través de nuevos representantes en Europa, y en otras regiones, ya que había visitantes de todo el mundo. La feria fue interesante, muy grande y con muchas cosas para ver y ahora empezaremos a trabajar con los contactos que hicimos".