En un contexto económico desafiante, la cámara subraya la importancia de este producto en la dieta de los argentinos y enfatiza la necesidad de eliminar el IVA para fortalecer el consumo interno.
El Día Mundial del Huevo fue establecido en Viena en 1996, con la decisión de celebrar el poder del huevo el segundo viernes de octubre de cada año. Desde 2006, Argentina conmemora la semana mundial del huevo, coincidiendo con el cierre de los festejos en la misma fecha. A lo largo de los años, esta celebración ha incluido una variedad de actividades, como festivales del huevo, congresos científicos, concursos de recetas, kermeses, donaciones de huevos y ceremonias de premios. Este año, Argentina celebrará con una maratón de recetas, donde 14 chefs y médicos cocinarán en vivo a través del canal de YouTube del Instituto Latinoamericano del Huevo.
Los huevos, considerados uno de los alimentos más antiguos, han alimentado a la humanidad desde tiempos inmemoriales, con domesticación de gallinas ponedoras que se remonta al año 7500 a.C. Desde 1996, amantes de los huevos en todo el mundo han ideado nuevas formas creativas de homenajear a este superalimento, rico en nutrientes valiosos para la salud.
La biodisponibilidad y densidad nutricional de los huevos pueden mejorar significativamente la nutrición humana. Como alimento de origen animal ampliamente consumido, los huevos son elogiados por sus beneficios nutricionales, especialmente en el desarrollo y crecimiento humano, siendo fundamentales para bebés, jóvenes y mujeres embarazadas, así como en entornos de bajos recursos. Los huevos aportan proteínas de alta calidad y 13 vitaminas y minerales esenciales para el organismo. Contienen todos los aminoácidos esenciales y tienen una puntuación de aprovechamiento de más del 100%, en comparación con el 37% del arroz y el 45% del trigo. Estos nutrientes son cruciales para la salud, ya que además de contribuir a la masa muscular, forman parte de la sangre, hormonas y anticuerpos. Dos huevos de tamaño medio proporcionan suficiente proteína para cubrir más del 30% de la ingesta diaria recomendada de proteínas para un adulto.
El huevo se ha consolidado como una de las proteínas animales más sostenibles a nivel global. Un estudio encargado por CAPIA al Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) indica que la producción de huevos en Argentina tiene una de las menores huellas de carbono y de agua en comparación con otras fuentes de proteínas animales. Este logro se debe a la incorporación de tecnología de vanguardia en el 80% de las granjas avícolas del país, posicionando al sector como un referente en prácticas ambientales responsables.
A pesar del crecimiento en la producción, el sector enfrenta distorsiones impositivas que afectan su competitividad. CAPIA insiste en la eliminación del IVA del huevo, actualmente gravado en un 21%, mientras que otras proteínas animales tributan solo el 10,5%. "Eliminar el IVA no solo aliviaría al consumidor, sino que también permitiría al sector avícola seguir creciendo y ofreciendo un producto saludable y accesible para todos los argentinos", afirmó Javier Prida, presidente ejecutivo de CAPIA.
En 2023, la producción de huevos en Argentina creció un 2,88%, alcanzando las 15.807.600.000 unidades, mientras que el consumo per cápita se incrementó, situándose en 336 huevos al año. "Es un reconocimiento al trabajo incesante del sector para impulsar el consumo de un alimento esencial en la dieta de los argentinos, que hoy supera los 352 unidades de consumo por habitante", destacó Prida.
La industria avícola tiene un fuerte impacto en la economía argentina, generando empleo directo e indirecto para más de 32.000 personas, con presencia en 18 provincias, principalmente en Buenos Aires, Entre Ríos, Córdoba y Mendoza. Este carácter federal de la industria es clave para el desarrollo económico de las economías regionales y el arraigo de las comunidades rurales, llevando desarrollo y trabajo de calidad a las localidades donde se produce.
