Las buenas reservas hídricas, un invierno con lluvias normales y la solidez del esquema trigo-soja de segunda impulsan una de las mayores intenciones de siembra de los últimos años. El trigo vuelve a ocupar un rol central en la estrategia productiva.
La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) confirmó que las intenciones de siembra en la zona núcleo superan en un 10% a la campaña pasada, con una superficie estimada que se aproxima a las 1,78 millones de hectáreas, cifra similar a la histórica campaña 2019/20, cuando se cosecharon 7 millones de toneladas.
"Se parte de una base más alta tras estudios realizados con imágenes satelitales, que revelaron 226.000 hectáreas más de trigo que las que se habían estimado inicialmente", destacó la entidad.
Las proyecciones del Servicio Meteorológico Nacional indican condiciones neutras en el Pacífico, lo que favorecería un invierno con lluvias normales para gran parte de la región pampeana.
"Las reservas de agua en el perfil son excelentes al inicio de la siembra", detalla el informe climático de la BCR, consolidando un escenario ideal para la implantación del cereal.
Los buenos rindes logrados en la soja de segunda en la campaña 2024/25 también incentivan la rotación clásica trigo-soja, que actualmente presenta márgenes más competitivos que la soja de primera y compite directamente con el maíz temprano.
Este contexto refuerza la decisión del productor de apostar al trigo como cultivo estratégico en el ciclo invernal.