El Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA) publicó este miércoles su esperado informe WASDE de junio, revelando un ajuste más pronunciado de lo anticipado en los inventarios finales de maíz para las campañas 2024/25 y 2025/26. El dato sacudió las expectativas de los mercados, que esperaban un escenario más conservador.
Stocks de maíz: ajuste doble
- La mayor sorpresa del informe fue el recorte en los stocks de maíz de EE. UU.:
- El stock final 2024/25 se redujo drásticamente, más allá de lo que proyectaban los analistas.
- También bajó el stock proyectado 2025/26, contraviniendo la idea de una recuperación del suministro.
Esto plantea un nuevo escenario para los precios de productos básicos (commodity prices), especialmente considerando que la demanda externa y para etanol sigue fuerte, con compromisos de exportación cercanos al 97% del objetivo anual, por encima del promedio quinquenal (91%).
Soja estable, sin sorpresas
A diferencia del maíz, el USDA mantuvo sin cambios las proyecciones de stocks de soja para EE. UU., en línea con las expectativas. Esto implica un balance sin señales alarmantes ni oportunidades inmediatas, aunque el seguimiento de la demanda -particularmente el crushing- será clave para el segundo semestre.
Panorama global: ajuste general
- El informe también mostró ajustes a nivel global:
- Stocks mundiales de maíz a la baja tanto para el ciclo actual como el próximo.
- Proyecciones de soja y trigo también se alejaron del consenso del mercado, con movimientos más conservadores pero igual de relevantes.
En cuanto a Argentina y Brasil, el USDA no modificó sus estimaciones de producción para maíz ni soja, manteniendo estables los grandes aportes sudamericanos al mercado global.
Reacción del mercado: calma con sesgo alcista
Los futuros de maíz abrieron con ligeras subas (1-2 centavos), reflejando una respuesta contenida pero positiva.
La soja también ganó algo de terreno, mientras que el trigo mostró comportamiento mixto.
Aunque el informe fue más ajustado de lo previsto, los precios todavía enfrentan presión estacional y climática. Aun así, la menor disponibilidad de maíz podría sostener cotizaciones si se combinan con algún evento climático adverso durante la temporada.
Implicancias para el productor
El informe refuerza la necesidad de tomar decisiones estratégicas:
- Productores de maíz: deben considerar coberturas, optimización de insumos y monitoreo de rendimientos (yields) con herramientas de agricultura de precisión (precision agriculture).
- Inversionistas y co-ops: atentos a oportunidades de productos de valor agregado y contratos diferidos.
- Políticas agrícolas: el contexto podría incidir en ajustes dentro del próximo Farm Bill (ley agrícola) y programas del USDA.
El WASDE de junio 2025 presenta un giro inesperado para el maíz estadounidense, con implicaciones que van desde los costos de insumos hasta la seguridad alimentaria (food security). Si bien la soja ofrece cierta estabilidad, el contexto general exige atención continua, gestión de riesgos y adaptación estratégica. En un entorno global cada vez más volátil, la agricultura de EE. UU. se enfrenta al desafío de anticiparse y liderar con resiliencia.