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Bajas temperaturas y sequía limitaron el rebrote de las pasturas de Cuenca del Salado

Se observaron campos con pastoreo continuo y exceso de carga que se encontrarán más comprometidos.

El estado de la vegetación y en particular los verdeos implantados en diversas regiones de la Cuenca del Salado, mostraron una menor tasa de crecimiento a la salida del invierno, respecto de ciclos anteriores, aseguran los técnicos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, sobre la base de las imágenes satelitales provistas por el Instituto de Clima y Agua del Inta.

El estado de la vegetación es consecuencia de las bajas temperaturas de julio y agosto, sumado a la escasez de lluvia que redujeron la tasa de crecimiento de la vegetación en el último mes, mostrando gran variabilidad entre los distintos partidos de la Cuenca, consignó un informe sobre la "Condición de la vegetación a salida del invierno 2019.

A partir de las imágenes satelitales los profesionales del Inta realizaron un registro sobre la situación actual de la vegetación en la zona estudiada, contrastando los datos con los obtenidos en períodos anteriores.

El material técnico forma parte de una secuencia de trabajos que relevan el estado de situación de los campos de la zona de influencia del Proyecto Regional con Enfoque Territorial en la Cuenca Norte, Centro y Sur, que surge del seguimiento de la evolución del estado de la vegetación, haciendo uso de información satelital y de los monitoreos a campo de las distintas agencias de extensión de la EEA Cuenca del Salado.

Al respecto los profesionales del Inta observan que "las bajas temperaturas de los meses de julio y agosto, conjuntamente con la escasez de lluvia redujeron la tasa de crecimiento de la vegetación en el último mes, mostrando gran variabilidad entre los distintos partidos de la Cuenca".

Fines de agosto y mediados de septiembre mostraron "el impacto de la menor tasa de crecimiento, con una menor disponibilidad forrajera que la media histórica para el invierno".

Las bajas temperaturas de los meses de julio y agosto, conjuntamente con la escasez de lluvia redujeron la tasa de crecimiento de la vegetación.

En relación a la respuesta de los verdeos implantados los profesionales indican que "fue muy variable, pero se puede ver que en términos promedios menor a la esperada", por lo que estiman que "puede haberse registrado una menor mineralización de la materia orgánica del suelo, dado que la temperatura del mismo se encontró entre 2 y 4 grados por debajo de la media", lo que afectó la tasa de crecimiento de la vegetación.

En cuanto al manejo ganadero el trabajo informa que "se han observado campos con pastoreo continuo y exceso de carga que se encontrarán más comprometidos, de retrasarse el inicio de la estación de crecimiento de primavera, cuyo pico se da a mediados de octubre una vez iniciado el servicio.

Asimismo "se han notado campos con escasa disponibilidad de recursos forrajeros, por lo que si se considera la necesidad de que la vaca tenga un estado corporal de 3 al inicio del servicio, se hará indispensable el ajuste de carga en los distintos potreros, y el uso de suplementación estratégica, si la hacienda se encuentra con valores de 2 a 2,5.

A esta altura del año queda poco tiempo para recuperar estado corporal pre-servicio, por lo que los técnicos indican "asignar los potreros en función de su receptividad a las categorías de mayores requerimientos", teniendo en cuenta que "la vaquillona de primer servicio debe afrontar la gestación y no comprometer su crecimiento".

Sobre las pariciones el informe señala que "se vienen desarrollando sin inconvenientes, dado que la hacienda mantuvo el buen estado corporal que ganó durante el otoño (marzo-inicio de junio), con valores que van del 70 al 90 %.

Para los referentes de la Experimental Cuenca del Salado, en la región "resulta indispensable monitorear el estado corporal de las madres, dado que es el momento de mayores requerimientos nutricionales y la movilización de reservas es alta". Si bien se está sobre el momento del los servicios, destacan la importancia de "realizar el control de enfermedades venéreas en toros, puesto que aún hay tiempo para reponer aquellos que den positivo".

En materia sanitaria, dado que durante el monitoreo "se han observado casos de sarna en distintos partidos", los técnicos sugieren "tomar los recaudos necesarios para evitar su diseminación y hacer el tratamiento adecuado", puesto que conjuntamente con los piojos afecta el estado corporal. Asimismo, si bien los casos de hipomagnesemia no han sido tan altos como otros años, podrían manifestarse más adelante si se producen precipitaciones que permita el rebrote, por lo que se deberán tomar medidas precautorias.