En su Panorama Agrícola Semanal, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires anticipó que va a ajustar a la baja la estimación de cosecha de soja -que igualmente esta semana mantuvo en 38 millones de toneladas- una vez que pueda dimensionar más certeramente las pérdidas que ocasionaron los excesos de lluvias ocurridos con las lluvias de abril y lo que va de mayo.
"La humedad ambiental, elevadas temperaturas, caída del rinde promedio e interrupción en la cosecha ponen en riesgo la producción nacional", dijo la BCBA en un resumen.
Hasta este jueves, la recolección de la oleaginosa llegó a cubrir el 66,7 % de la superficie implantada la campaña en curso.
"El clima húmedo frena la cosecha en gran parte de la región agrícola. Desde nuestro informe previo, registramos el paso de otro importante frente de tormenta, importante no solo por la gran extensión de su cobertura sino también por el significativo volumen de agua que descargó en poco tiempo", dijo el informe.
Agregó que "estas precipitaciones demoran la cosecha, dejando más de 5,7 MHa expuestas al impacto negativo de la prolongada humedad ambiental y las elevadas temperaturas".
"Bajo este escenario, es muy probable que una vez que se reactive la cosecha y comprendamos con mayor claridad las pérdidas en producción, debamos ajustar nuestra proyección nacional para la campaña en curso, que hasta ahora se mantiene en 38 millones de toneladas", anticipó la BCBA.
Durante los últimos días, varias zonas del centro y sur del área agrícola informaron problemas de brotado y manchado del grano, elevando el riesgo de abandono de lotes que ya acarreaban bajo potencial de rinde como consecuencia al déficit hídrico estival. Las regiones más comprometidas involucran amplios sectores de Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y oeste y norte de Buenos Aires.
En paralelo, el avance de cosecha relevado esta semana fue de tan solo un 4,9 %, elevando la superficie cosechada nacional al 66,7 % del área apta y recortando la brecha interanual a tan solo 0,2 puntos porcentuales. Pese al escaso progreso intersemanal, el rinde medio nacional descendió 0,4 qq/Ha, marcando una abrupta caída en la productividad del cultivo debido al progreso en la recolección sobre lotes de segunda.