El Banco Mundial proyecta una caída generalizada de los precios de materias primas durante 2025, en un contexto de desaceleración económica global, tensiones comerciales y ajustes en la oferta mundial.
Según el informe Commodity Markets Outlook, publicado este martes, los precios de productos energéticos y metálicos experimentarán retrocesos importantes, mientras que productos agrícolas como el café y el cacao podrían alcanzar niveles históricos.
"El Banco Mundial pronostica que los precios de las materias primas caerán un 12% en 2025 y un 5% adicional en 2026", destaca el reporte. Aunque los valores nominales seguirán por encima del promedio 2015-2019, el retroceso real será significativo.
Para América Latina, las consecuencias serán dispares: mientras países como Chile, Perú, Colombia, Brasil y México verán afectadas sus exportaciones de cobre y petróleo, otros como Brasil, Colombia y Ecuador podrían capitalizar la suba del café y el cacao.
"La subida de los precios de las materias primas fue una bendición para muchas economías en desarrollo. Pero ahora enfrentamos la mayor volatilidad de precios en más de 50 años", advirtió Indermit Gill, economista en jefe del Grupo Banco Mundial.
El petróleo en caída libre
El precio del petróleo Brent, referencia clave para la región, caerá a US$64 por barril en 2025, frente a los US$80,7 del año anterior.
"Se proyecta que el crudo Brent promediará US$64 por barril en 2025", señala el informe, citando la combinación de desaceleración de la demanda y mayor oferta global, impulsada por Brasil, Canadá y Guyana.
En un escenario de crisis más profunda, el precio del petróleo podría descender a US$59 por barril, advirtió el organismo. Esto afectaría seriamente a los saldos fiscales de los países exportadores de energía, debilitando su capacidad de respuesta ante shocks externos.
Gill recomienda a los países restablecer la disciplina fiscal, fomentar la inversión privada y liberalizar el comercio para enfrentar esta nueva etapa.
El cobre, golpeado por la desaceleración
El cobre, del cual Chile y Perú son grandes proveedores, también sufrirá presiones bajistas. El Banco Mundial estima que el precio del cobre promediará US$8.200 por tonelada en 2025, un 10% menos que en 2024.
La caída en la actividad manufacturera global, especialmente en China, y la puesta en marcha de nuevas minas, explican el deterioro.
En un escenario de recesión más aguda, el precio del cobre podría caer hasta un 19%, profundizando el impacto negativo en las economías andinas.
Café y cacao: los ganadores inesperados
En contraste, el sector agrícola muestra signos positivos. El precio del café Arábica alcanzaría los US$8,50 por kilo en 2025, un salto del 51,2% respecto a 2024.
La sequía en Brasil limitó la oferta de café y cacao, empujando los precios al alza. Para Colombia, Honduras y Perú, esta tendencia representa una oportunidad para mejorar los ingresos rurales y fortalecer las cuentas externas.
Asimismo, el cacao registraría un incremento del 9,1%, situándose en US$8,00 por kilo en 2025. Ecuador, principal productor latinoamericano, se vería particularmente beneficiado.
Más volatilidad, menos inflación
A pesar de las diferencias entre productos, el Banco Mundial advierte que la volatilidad de precios seguirá siendo elevada debido a factores estructurales globales.
Además, la baja en los precios de la energía contribuiría a reducir la inflación global en 2025, restando entre 0,35 y 0,5 puntos porcentuales a las tasas de inflación.
La tendencia de desinflación, iniciada en 2022, continuará en 2025, aunque con menor intensidad, en un mercado donde los precios se estabilizarán en niveles más bajos hacia 2026