Llegó la temporada de invierno y con ella surgen las dudas habituales sobre cómo desempañar los vidrios del auto.
La respuesta a todas estas preguntas es una sola: para desempañar los vidrios de tu auto de manera eficiente, es crucial encender el aire acondicionado. Aunque esto puede implicar un mayor consumo de combustible, es la solución perfecta para garantizar una visibilidad adecuada.
A pesar de su efectividad, hay conductores que cuestionan la utilidad del aire acondicionado para desempañar los vidrios. No obstante, no existe ninguna duda al respecto, ya que se trata de un método comprobado y completamente eficaz, respaldado por la experiencia de numerosos conductores.
Es importante mantener el aire acondicionado encendido durante todo el proceso de desempañado. Sin embargo, se puede ajustar la temperatura a gusto. Tanto el modo de frío como de calor son válidos. La clave radica en activarlo, ya que ayuda a eliminar la humedad.
Uno de los errores más comunes es encender el aire acondicionado al mismo tiempo que la recirculación del aire. Si bien esta última opción puede ser efectiva en verano, ya que enfría aún más el aire, en invierno es esencial desactivarla para permitir que el aire exterior ingrese al vehículo.
Se recomienda dirigir el flujo de aire hacia el parabrisas para acelerar el proceso de desempañado. En cambio, la luneta trasera se desempañará automáticamente con solo presionar un botón, ubicado en la consola central o en la perilla derecha detrás del volante, dependiendo del modelo del auto.
Para asegurar el éxito de este proceso, es fundamental mantener los vidrios del auto limpios y verificar que las escobillas de los limpiaparabrisas estén en buen estado en caso de lluvia.
En caso de que tu vehículo no cuente con aire acondicionado, la opción recomendada es bajar ligeramente las ventanillas. Sin embargo, nunca intentes utilizar un trapo o una gamuza mientras conduces, ya que esto requeriría apartar la atención de la carretera y soltar una mano del volante, lo cual es peligroso.
Si deseas conocer más acerca del funcionamiento del sistema de calefacción de los autos, te invitamos a revisar nuestro informe especial: "Consejos para utilizar la calefacción de tu auto".
Prende la calefacción sin prisas: La calefacción de los autos está directamente relacionada con el motor, por lo que si este no está caliente, será difícil calentar el habitáculo. No sirve de nada ingresar al vehículo y poner la calefacción al máximo, ya que si el motor no ha alcanzado la temperatura adecuada, el aire que saldrá será frío. Para obtener aire caliente, el motor debe estar aproximadamente a la mitad de la escala de temperatura.
Evita encender el aire acondicionado: Si lo que buscas es aumentar la temperatura y no enfriar el habitáculo, no tiene sentido activar el aire acondicionado. Además de ser ineficiente, ya que consume más energía y combustible, encender el aire acondicionado mientras utilizas la calefacción puede causar problemas en el sistema.
Recuerda que el aire caliente asciende y el frío desciende: Esta ley física también se aplica al sistema de climatización del vehículo. La calefacción será más eficiente si diriges el flujo de aire hacia los pies, permitiendo que el calor se distribuya hacia el resto del habitáculo de forma natural.
Mantén una temperatura ambiente: Tener una temperatura excesivamente alta en el vehículo no solo es perjudicial para el sistema, sino que también representa un riesgo para tu seguridad. Forzar la calefacción al máximo para calentarte rápidamente sobrecarga el motor del sistema y lo desgasta prematuramente. Además, conducir con una temperatura excesiva puede causar somnolencia, lo que representa una de las principales y más graves causas de accidentes de tránsito. Se recomienda mantener la temperatura entre 19 y 22 grados Celsius tanto en invierno como en verano.
No te abrigues en exceso: Aunque parezca sorprendente, conducir con demasiada ropa no es seguro. Por ejemplo, utilizar guantes dificulta el agarre del volante y la palanca de cambios. Asimismo, llevar un abrigo voluminoso limita la movilidad y evita que el cinturón de seguridad se ajuste correctamente al cuerpo.