Autos

Para qué sirven y por qué demoran tanto las homologaciones de los autos para el mercado argentino

Las homologaciones son cruciales para garantizar la seguridad de los usuarios y la protección del medioambiente.

Este proceso permite que solo vehículos que cumplen con estrictos requisitos de seguridad y emisiones puedan ser vendidos y circulen en la vía pública. A pesar de su importancia, el proceso de homologación es un trámite tedioso que puede tardar entre 8 a 12 meses, debido tanto a la evaluación de la documentación requerida como al tiempo de traslado de los vehículos por barco.

Dos certificaciones esenciales deben ser obtenidas para lanzar un nuevo modelo al mercado: la Licencia para Configuración de Modelo (LCM), que se enfoca en la seguridad del vehículo, y la Licencia para Configuración Ambiental (LCA), relacionada con las emisiones del auto. Estas licencias requieren una detallada revisión de documentación por parte del INTI (Instituto Nacional de Tecnología Industrial), lo que añade una capa de complejidad al proceso.

Un aspecto importante del trámite es el RUMP (Registro Único de la Matriz Productiva), necesario para evitar la venta de autos de fin de serie sin garantías adecuadas. Además, el proceso implica costos elevados, siendo aproximadamente de 8.000 dólares para obtener tanto la LCM como la LCA.

Recientes cambios implementados por la Subsecretaría de Industria y el INTI buscan agilizar el proceso. Ahora, los documentos en inglés no requieren traducción al español, y se ha mejorado la manera en que se solicitan aclaraciones durante la revisión de los expedientes, esperando reducir los tiempos de homologación a la mitad o incluso menos.

El expediente CAPE, necesario para los repuestos de cada modelo, y la certificación de piezas con norma ISO 17025 en laboratorios de Brasil o Chile, son otros componentes del proceso que aplican tanto para vehículos nacionales como importados.

Re-homologación se vuelve necesaria debido a que las versiones de vehículos enviadas a mercados como el latinoamericano a menudo difieren de aquellas disponibles en mercados con normativas más estrictas. Esto se debe a diferencias en los costos y en la calidad del combustible, lo que justifica la adaptación de los vehículos a las condiciones locales a través de la homologación.

Este complejo proceso asegura que solo los vehículos que cumplen con todas las normativas de seguridad y emisiones sean accesibles al consumidor argentino, reforzando la importancia de las homologaciones en la preservación de la seguridad vial y la protección ambiental.


Agrolatam.com