Es vital comprender qué es, cómo se produce y cómo evitarlo para garantizar una conducción segura.
¿Qué es el aquaplaning? Se produce cuando los canales de las cubiertas no logran evacuar toda el agua del pavimento, causando un efecto de deslizamiento donde el vehículo "flota", perdiendo las ruedas todo agarre y, por tanto, el conductor el control del automóvil.
Este fenómeno se ve influenciado por varios factores: la velocidad de circulación (a mayor velocidad, menor es la evacuación del agua y el agarre), el estado de las cubiertas (el desgaste o la falta de dibujo agrava el riesgo), y la presión adecuada de las mismas para evitar aumentar innecesariamente la superficie de contacto con el asfalto húmedo.
Los tres principales motivos que provocan el aquaplaning son:
Pavimento mojado.Cubiertas desgastadas o con baja presión.Velocidad excesiva.Para mitigar el efecto del aquaplaning, es crucial:
Sujetar firmemente el volante sin giros bruscos.Levantar suavemente el pie del acelerador.Evitar frenazos bruscos para no bloquear las ruedas.La calma es fundamental en estas situaciones para permitir que el vehículo recupere el agarre y la dirección adecuados.
Prevención es clave:
Revisar la presión de las llantas regularmente, ajustándolas según las recomendaciones del fabricante.Adaptar la velocidad a las condiciones de la carretera, especialmente bajo lluvia intensa para disminuir el riesgo de aquaplaning.Desactivar el control de crucero para mantener el control manual del vehículo.Observar el camino adelante para anticiparse a posibles charcos que puedan inducir al aquaplaning.Entender y prevenir el aquaplaning no solo es crucial para la seguridad del conductor, sino que también es una responsabilidad compartida para proteger a todos en la vía.