Clima

"Los pronósticos desalientan cualquier probabilidad de un evento atípico"

Finalmente, mayo concluyó sin sorpresas, con un comportamiento atmosférico que se ajustó a los pronósticos sin brindar ningún alivio pluvial a los suelos de la región pampeana.

 El ingreso de aire polar hacia el centro del país no encontró suficiente humedad en el aire como para provocar precipitaciones que aportaran algún tipo de mejora a los castigados perfiles de la franja oeste del país.

Las únicas lluvias que se registraron en la última semana del mes nuevamente beneficiaron al extremo norte de la mesopotamia, principalmente al noreste de Corrientes y Misiones, que recibieron parte de los importantes eventos que dejaron como saldo inundaciones en el sudeste de Brasil.

La circulación de aire frío y seco que predominó desde el fin de semana potenció un marcado y generalizado descenso de las temperaturas, con valores que llegaron hasta los siete grados bajo cero, provocando heladas intensas durante tres días consecutivos.

El comportamiento pluvial deficitario del mes de mayo en las regiones del oeste siempre está dentro de las posibilidades. Pero el avance de la escasez de lluvias sobre el sector este y la marcada diferencia con los valores normales que presentó mayo del 2022 quedaron fuera de las previsiones.

Sin lluvias significativas desde abril las reservas de agua en el suelo se han ido deteriorando paulatinamente. Si no lo hicieron más rápido fue por la baja demanda atmosférica y la preponderancia de días con elevado rocío nocturno. A pesar de esto, la condición actual de los perfiles muestra claramente el marcado déficit de la franja oeste y la merma de los sectores con humedad adecuada, que ya se restringen a las zonas ubicados más al este de la región pampeana.

Los valores acumulados de agua necesarios para recomponer plenamente las reservas están lejos de las estadísticas entrando en el invierno y mucho más sobre el oeste mediterráneo.

Iniciamos junio con un ambiente muy frío y seco, alejado de proveer condiciones para un cambio de escenario. Los pronósticos desalientan cualquier probabilidad de un evento atípico en los próximos quince días. Todo parece indicar que junio presentará un comportamiento parecido al de mayo, sin aportes abundantes e inesperados que le den previsibilidad a la campaña que se inicia.