Clima

El Niño en la campaña 23/24: Cambios, desafíos y promesas para el campo Argentino

Mucho se ha especulado sobre El Niño y su posible impacto en la campaña 23/24, desde pronósticos apocalípticos hasta titulares llamativos

 Ahora, con tres campañas consecutivas de La Niña, la llegada de un cambio total de condiciones es imperativa. La sequía, cada vez más pronunciada, ha dejado al país sin reservas hídricas, con napas en niveles extremadamente bajos y sin fuentes de agua.

El evento El Niño, esperado con ansias, comenzó a manifestarse desde septiembre, trayendo cambios notables en la circulación atmosférica. Aunque inicialmente las lluvias se limitaron al extremo noreste del país, sur de Brasil y Paraguay, la situación está evolucionando gradualmente.

Desde septiembre hasta octubre, Misiones y Corrientes acumularon más de 1000 mm de lluvia, causando crecidas en los ríos Paraná y Uruguay. Sin embargo, ¿cuál es la situación actual?

Desde el punto de vista de la temperatura del Pacífico Ecuatorial Central, se confirma la presencia de un evento El Niño fuerte, proyectándose su persistencia hasta al menos el próximo otoño. Los modelos climáticos predicen un pico máximo "muy fuerte" en pleno verano.

Las probabilidades de mantenerse en un estado El Niño superan el 90%, mientras que la transición a condiciones neutrales es poco probable. La posibilidad de regresar a La Niña es totalmente nula hasta fines del verano.

¿Qué impactos se esperan con la persistencia de El Niño hasta el otoño?

Lluvias: Aunque las lluvias han comenzado, la humedad del suelo sigue siendo insuficiente. La capacidad de infiltración es crucial, ya que muchos lotes han perdido absorción después de meses sin precipitaciones. Se proyecta un verano con lluvias superiores a la media, especialmente en el Litoral y noreste de Buenos Aires, moderadas en la región central y con déficit en el oeste.

Temperatura: Las marcas térmicas se mantendrán por encima de lo normal, con olas de calor prevenidas pero menos extremas que el año pasado debido al mayor nivel de lluvias.

La campaña 23/24 se presenta prometedora. Con tecnología y recursos disponibles, los productores argentinos pueden aprovechar esta situación, marcando el inicio de la recuperación después de tres difíciles años.

Agrolatam.com