El vehículo, perteneciente a la firma Larrauri, sufrió el accidente con el acoplado cargado de animales. Minutos después, vecinos de la zona se acercaron al lugar para retirar y faenar los animales en el mismo lugar del siniestro.
La situación escaló rápidamente cuando los vecinos no solo comenzaron a faenar a los animales, sino que también agredieron al transportista y al personal de la empresa que intentaba controlar la situación.
La Cámara de Frigoríficos de la Provincia de Santa Fe (Cafrisa) repudió enérgicamente los hechos a través de un comunicado:
"Un socio de nuestra entidad (Larrauri) fue víctima de salvajes hechos de violencia, luego de un accidente, donde particulares no sólo faenaron a los animales, sino que también lesionaron al transportista y personal de la empresa".
Además, Cafrisa criticó la "absoluta pasividad" de las autoridades locales frente a los acontecimientos.
Tras la violencia desatada, el acoplado quedó completamente vacío, ya que todos los animales fueron retirados y faenados en el lugar por los vecinos. Finalmente, se procedió a remover el vehículo de la ruta, pero los hechos dejaron un fuerte malestar en el sector ganadero.
El incidente no solo genera preocupación por la seguridad en las rutas, sino también por el respeto a las normas y el rol de las autoridades. Desde el sector, se espera que las investigaciones avancen y que se tomen medidas para evitar que hechos de este tipo se repitan.
La violencia y el saqueo en Mercedes ponen nuevamente en el foco la importancia de garantizar seguridad y justicia en el transporte de hacienda.
