Ganaderia

Uruguay busca modernizar su ganaderia con  trazabilidad con inteligencia y precisión

A partir del lunes 12 de mayo, el país lanzará una licitación internacional para renovar su sistema de identificación electrónica de vacunos.

Con casi dos décadas de experiencia en trazabilidad individual del ganado, Uruguay se prepara para dar un nuevo salto tecnológico. A partir del lunes 12 de mayo, el país lanzará una licitación internacional para renovar su sistema de identificación electrónica de vacunos, un modelo que ha sido referencia global y orgullo del sector agropecuario oriental.

El proceso, que será coordinado por el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) en conjunto con la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), apunta a incorporar herramientas de última generación que mejoren la precisión, la eficiencia y la capacidad de monitoreo del rodeo nacional, estimado en unos 12 millones de animales.

Pero no se trata solo de reemplazar caravanas electrónicas por nuevas. El objetivo es más ambicioso: repensar la trazabilidad desde una lógica de datos, conectividad y sustentabilidad.

trazabilidad 2.0: del seguimiento al conocimiento

Miguel Sierra, presidente del INIA, fue claro al explicar la dimensión del cambio. "Estamos ante una transformación tecnológica, no un simple recambio de dispositivos. Buscamos soluciones que integren geolocalización, sensores inteligentes y autonomía energética, todo dentro de un esquema accesible y escalable", señaló en diálogo con radio Carve.

Y agregó: "Recibimos propuestas muy innovadoras desde países con fuerte experiencia en el rubro, como Australia o Brasil, pero también de investigadores uruguayos que hoy trabajan en el exterior. Queremos que este sea un proyecto con ciencia nacional y mirada global".

El nuevo sistema contempla seis capacidades tecnológicas que antes solo parecían parte de una utopía agrotech: localización continua, baterías de larga duración, sensores inviolables, monitoreo de comportamiento animal, y compatibilidad con ovinos y equinos.

ciencia aplicada al campo, sin perder de vista el costo

Uno de los grandes desafíos es mantener la inversión en niveles razonables. Hoy, cada unidad cuesta cerca de 90 centavos de dólar, y el sistema se financia con fondos públicos. Por eso, se exigirá que las soluciones presentadas estén en fase de prototipo avanzado y listas para validación en terreno.

INIA realizará las pruebas en campos experimentales como Glencoe, La Estanzuela y Treinta y Tres. Cada empresa deberá presentar al menos 30 unidades funcionales que soporten un año de evaluación a campo abierto.

Además, se valorará la inclusión de instituciones académicas uruguayas en el desarrollo, lo que busca fortalecer el vínculo entre ciencia, producción y territorio.

una transición sin apuros

Desde el organismo aseguraron que no se obligará al reemplazo inmediato de las caravanas existentes. "Vamos a evaluar diferentes tecnologías que puedan complementarse con el sistema vigente. No se trata de tirar todo y empezar de cero, sino de evolucionar con sentido común y eficiencia", subrayó Sierra.

una decisión estratégica con impacto regional

Uruguay fue pionero en la trazabilidad individual obligatoria en el hemisferio sur, y esa ventaja le permitió acceder a mercados exigentes y consolidar su marca país. Con esta modernización, apuesta a profundizar ese camino y proyectarse como un laboratorio a cielo abierto para tecnologías ganaderas.

En momentos en que la demanda global exige más transparencia, sanidad y sustentabilidad, esta jugada no solo habla de innovación: también refleja una visión estratégica de país agroexportador inteligente.