El mercado de granos en Chicago ha sido testigo de una tendencia a la baja en los precios de los principales cultivos. La soja, el maíz y el trigo cerraron con mermas, influenciados por factores climáticos y la especulación de los fondos de inversión.
Los precios de la soja cerraron con bajas en el mercado de Chicago, sumándose a la tendencia negativa que ya habían experimentado el trigo y el maíz durante más de una semana. Los contratos de agosto y septiembre de la oleaginosa retrocedieron 1,17% y 0,73%, alcanzando los valores de US$525,34 y US$505,78 la tonelada, respectivamente.
Uno de los principales fundamentos de esta disminución en los precios de la soja radica en las lluvias que se registraron en algunas regiones de Estados Unidos, como Nebraska, el centro-sur de Iowa, el sur de Illinois y zonas de Missouri. Estas precipitaciones brindaron alivio a los suelos y a los cultivos que venían padeciendo déficit hídrico, lo que llevó a una menor demanda de este grano en el mercado.
El maíz también retrocedió, experimentando una caída del 1,76% y ubicándose en US$192,22 la tonelada. Al igual que en el caso de la soja, las lluvias fueron uno de los factores determinantes en esta tendencia negativa, ya que generaron una mayor oferta del grano en el mercado. Además, los fondos de inversión especulan con una cosecha récord para el año 2023/2024, lo que incrementa la oferta y ejerce presión sobre los precios.
Por otro lado, el trigo también sufrió una disminución en su valor, cayendo un 1,87% y posicionándose en US$235,16 la tonelada. El desinterés de los fondos de inversión en apostar por un horizonte alcista para el cereal y el progreso de la cosecha en el hemisferio Norte, junto con las lluvias positivas para los trigos de primavera en Dakota del Norte, también contribuyeron a esta tendencia negativa.
En resumen, las cotizaciones de los principales granos en el mercado de Chicago experimentaron caídas debido a factores climáticos favorables que aliviaron el déficit hídrico en cultivos de Estados Unidos. La especulación de los fondos de inversión sobre una cosecha récord para el próximo año también ha influido en la tendencia bajista de los precios de los granos.