Los precios mundiales de las materias primas alimenticias se mantuvieron estables durante octubre, según consignó hoy el indicador de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Desde el inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania en marzo pasado, el indicador presenta una baja de 14,9% con siete meses consecutivos de merma, aunque sigue reflejando una suba de 2% en la comparación interanual.
Al igual que en septiembre, los cereales marcaron la única excepción entre todos los comodities alimenticios al subir 3% mensual, manteniéndose 11,1% por encima del valor de hace un año.
Entre los granos, el trigo se encareció en 3,2%, debido a la incertidumbre respecto a la continuidad del acuerdo entre Rusia y Ucrania para el transporte de grano en el Mar Negro, al igual que las perspectivas revisadas a la baja de la producción en Estados Unidos.
De no renovarse el acuerdo -que vence a mediados de este mes-, los granos podrían registrar una nueva escalada en sus cotizaciones.
En tanto, el maíz repuntó 4,3% por menores previsiones de oferta por parte de Estados Unidos y la Unión Europea, las condiciones secas para la siembra en Argentina, al igual que la situación mencionada en el Mar Negro que puede perjudicar las exportaciones ucranianas.
Por su parte, el sorgo y la cebada subieron 3,0% y 0,3%, respectivamente; mientras que el arroz mantuvo su tendencia al alza aunque la baja demanda permitió contener el aumento en 1%.
Respecto de la perspectiva para los próximos meses, debido a las menores estimaciones para el trigo, la FAO nuevamente modificó a la baja su previsión de producción mundial de cereales de 2022 en 4,9 millones de toneladas a 2.764 millones, 1,8% menos que el año anterior.
En cuanto a los aceites vegetales, estos continuaron su desplome con una caída de 1,6% y ya acumulan una merma de 20% interanual.
El descenso obedeció a ?la baja de los precios mundiales de los aceites de palma, soja y colza, que compensó con creces la suba de las cotizaciones del aceite de girasol?, en este último caso por ser Ucrania uno de los principales productores, explicó la FAO.
Entre las demás commodities, el azúcar descendió 0,6% por las mejores perspectivas de producción en India, aunque la merma se contuvo por el daño a las cosechas por las precipitaciones y el alto precio del etanol en Brasil que impulsó el uso de la caña para producir este combustible; al igual que la fuerte demanda de Indonesia y China.
Los lácteos registraron una baja de 1,7% en su cuarto descenso mensual consecutivo, por menores compras de las previstas por China y ?en general- de todos los importadores que tienen cubiertas sus necesidades inmediatas, al igual que el debilitamiento del euro ante el dólar.
La FAO señaló que la inflación y la posibilidad de una recesión en los países consumidores también presionó a la baja a los precios de los lácteos.
Por último, las carnes descendieron 1,4%, por una mayor oferta exportable y una baja demanda importadora, aunque el subíndice se sigue manteniendo 5,8% por encima de su valor de hace un año.
La carne ovina registró la caída más pronunciada, al igual que la de cerdo, mientras que menor fue el descenso en los productos bovinos.
La carne de aves de corral también siguió la tendencia a la baja, pese a los problemas que registró su producción por los brotes de gripe aviar.
Con información de Télam
