El campo sanjuanino atraviesa uno de sus momentos más críticos. El Gobierno provincial declaró el Estado de Emergencia y Desastre Agropecuario tras constatar severos daños en cultivos en 17 departamentos, con pérdidas que en algunos casos alcanzan el 100%. La medida, confirmada por el ministro de Producción, Trabajo e Innovación, Gustavo Fernández, apunta a aliviar el impacto de una campaña devastada por factores climáticos.
"La situación ha sido crítica y afecta principalmente a la vid, que representa casi la mitad de las hectáreas cultivadas en la provincia, pero también al olivo -ya con cosecha finalizada- y al pistacho, un cultivo en expansión", detalló Fernández en declaraciones televisivas.
El decreto provincial que formaliza la emergencia será remitido a la Cámara de Diputados para su ratificación y, en paralelo, se solicitará a Nación el reconocimiento del estado de emergencia para poder activar beneficios fiscales y crediticios a nivel federal.
El relevamiento se sustentó en unas 450 denuncias de productores que permitieron determinar la gravedad de los daños. "En promedio, las pérdidas oscilan entre el 40% y el 50%, pero en varias zonas superan el 80% e incluso alcanzan el 100%", explicó el ministro.
Antes de esta declaración, ya se habían puesto en marcha subsidios para pequeños productores y líneas de crédito para recomponer capital de trabajo en establecimientos medianos. No obstante, Fernández advirtió que el acceso a estos beneficios requiere de una denuncia previa de daños. "Muchos productores no informan por no ver beneficios inmediatos, pero cuando se activa la emergencia, quienes no lo hicieron quedan afuera", alertó.
Desde la cartera productiva se espera que el Gobierno nacional avance con el reconocimiento formal de la emergencia, para así extender los beneficios y mitigar los efectos de una de las temporadas más duras en la historia reciente de la agricultura sanjuanina.