La Cámara Nacional del Maíz Industrializado (Canami) ha advertido que México podría necesitar aumentar sus importaciones de maíz amarillo en un 28% para 2024. Este incremento se debe a una combinación de problemas de comercialización, precios bajos y una reducción en la producción del cereal, principalmente causada por una severa sequía que ha afectado a gran parte del país.
Esteban Jaramillo, director general de la Canami, en una reciente reunión plenaria del Consejo Nacional de Fabricantes de Alimentos Balanceados y de la Nutrición Animal (Conafab), destacó la gravedad de la situación. "Estamos experimentando una sequía importante que impacta al 78% del país. Como resultado, esperamos que la producción se reduzca en un millón de toneladas, disminuyendo de 19 millones a 18 millones", explicó Jaramillo.
La preocupación aumenta al considerar que los estados de Sinaloa y Sonora, principales productores de maíz amarillo en México y ubicados en el noroeste, enfrentan una capacidad limitada de sus presas, solo al 28% de su capacidad total, lo que significa una severa restricción en sus capacidades de riego.
México, aunque es autosuficiente en la producción de maíz blanco, destinado al consumo humano, tiene un déficit en la producción de maíz amarillo. Este último es un ingrediente clave en la industria de alimentos balanceados. En 2022, el sector tuvo que importar aproximadamente 12 millones de toneladas, representando el 67% del total consumido, y se espera que esta tendencia continúe.
Jaramillo añadió que, de manera habitual, México importa al menos el 40% de sus necesidades de maíz amarillo, lo que equivale a 18 millones de toneladas en promedio. Sin embargo, debido a la sequía y la disminución de la productividad, se proyecta que las importaciones podrían ascender a 23 millones de toneladas el próximo año.
El panorama se complica aún más por las políticas mexicanas contra el maíz transgénico y el glifosato, lo que ha dado lugar a un panel de controversias en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Este mecanismo evaluará si México está incumpliendo el acuerdo comercial a través de las restricciones impuestas por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Jaramillo recordó que si se determina un incumplimiento, Estados Unidos y Canadá podrían imponer aranceles a las exportaciones mexicanas como compensación.
Para finalizar, Jaramillo subrayó la importancia vital del maíz en la dieta mexicana y su uso en más de 60 sectores industriales, enfatizando la necesidad de encontrar una solución que no perjudique al consumidor final. Este escenario destaca la complejidad y la interconexión del sector agropecuario con otros aspectos de la economía y la vida diaria en México.